In Memoriam 2006

Querido diario:

El 2006 que está a punto de decirnos adiós ha dejado tras de si un reguero de fiambres que han ido desfilando por la Clínica a lo largo de 365 días. La verdad es que ha sido un año especialmente apetitoso para un necrófilo como yo ya que grandes nombres han abandonado el mundo terrenal para pasar a la inmortalidad del celuloide.

Tal vez dos sean los nombres que más hayan afectado a la comunidad cinéfila este año. Uno es Robert Altman que nos dejó el pasado mes después de haber recibido de forma honorífica el Oscar que tantas veces le habían negado. Murió a los 81 años dejando tras de si un buen ramillete de películas como "Nashville", "Vidas cruzadas", "El juego de Hollywood" y "Gosford Park" que le han situado como el rey del plano secuencia y como el principal difusor de las películas corales. Además dejó pendiente de estreno su última película, "A prairie home companion" la historia de la última función radiofónica de un grupo country.

El mismo año en el que cumplió 90 años, también falleció Glenn Ford. Un actor que nunca fue nominado al Oscar pero que permanece en la retina de muchos de los espectadores sobre todo por esa bofetada que propinó a Rita Hayworth en la inmortal "Gilda". Pero Ford fue algo más de eso, y a pesar de no ser un grandísimo actor, si que tenía un carisma que atrapaba al espectador que pudo disfrutarlo en un buen puñado de películas que van desde algunas de las cintas películas del western hasta encarnar al padre adoptivo de Superman en la primera película sobre el hombre de Kripton.

También murieron símbolos del cine como Philippe Noiret , ese entrañable actor francés que proyeccionaba desde la cabina del "Cinema Paradiso" o la regordeta Shelley Winters que ganó el Oscar por "El diario de Ana Frank" y que demostró sus grandes dotes para la natación en la primera versión de "Poseidón".

Dos Jack veteranos también dijeron hasta siempre. Actores que eran más conocidos por su cara que por su nombre. Jack Warden falleció a los 85 años y Jack Palance hizo lo propio a los 87 después de largos años de enfermedad. Los dos fueron secundarios de lujo y dentro de su género se convertían en los auténticos amos de la función cuando aparecían en pantalla.

El cine político y de compromiso se vistió de luto en Septiembre con el fallecimiento de Gillo Pontecorvo. Director de carrera irregular pero autor de "Operación negro", sobre el asesinato del Presidente del Gobierno español en la etapa franquista Carrero Blanco, y la muy necesaria "La batalla de Árgel" sobre el conflicto de la independencia de Argelia y de cómo Francia luchó para mantener el poder sobre sus colonias.

Especialmente cruel ha sido la guadaña de la muerte en Hispanoamérica dejándonos sin tres de los realizadores más interesantes de ese continente. Murieron repentinamente Fabián Bielinsky, el director de "Nueve reinas" y "El aura", y Eduardo Mignona autor de algunas de las películas argentinas de más éxito en España como "Sol de otoño" y "El faro". Más dolorosa fue, por la temprana edad en la que lo hizo, la pérdida del uruguayo Juan Pablo Rebella uno de los prometedores directores de "Whisky".

El recordado documentalista Joaquim Jordá, Shoei Inamura, Eloy de la Iglesia, Chris Penn, Aarón Spelling, Bruno Kirby, Malcom Arnold, Claude Jade y Peter Boyle son solo algunos nombres más del extenso parte de bajas que deja el cine algo más huérfano este año.