Conexión Oscar 2017: ¿Qué opciones tiene "Un monstruo viene a verme"?

Querido primo Teo:

Con carácter de acontecimiento acaba de llegar a nuestros cines “Un monstruo viene a verme” de Juan Antonio Bayona, no es para menos debido al enorme éxito que acompaña al director barcelonés desde que estrenara su ópera prima “El orfanato” hace casi una década. El film, con clara vocación de conquistar al mercado internacional, cuenta con el respaldo de Focus Features que ha invertido 20 millones de dólares en su campaña de marketing y distribución en los Estados Unidos, la compañía tiene la intención de ir a la caza de nominaciones al Oscar después de que fuese uno de los estrenos más exitosos de la pasada edición del Festival de Toronto.

La película iba a iniciar su recorrido por las carteleras usamericanas el 21 de Octubre, pero Focus Features decidió mover su fecha de estreno al 23 de Diciembre, exhibiéndola de manera limitada en diez ciudades, antes de que llegue a los 1.500 cines el 6 de Enero. La compañía argumentó dos motivos; el primero es que chocaba frontalmente con algunos estrenos potentes como “Jack Reacher: Nunca vuelvas atrás”, “Ouija: El origen del mal” y especialmente “I’m not ashamed”, que narra la historia real de una adolescente que promulga los valores de la vida cristiana, de las tres es la que puede aproximarse más al público de “Un monstruo viene a verme”, y la segunda es que prefiere esperar a que la película termine su recorrido internacional, Estados Unidos es una de las últimas plazas que recibirán al film de Bayona junto con Inglaterra y Alemania.

No dejo de ver similitudes con la estrategia organizada hace cuatro años por Summit Entertainment con “Lo imposible”. Aunque en los Estados Unidos el film nunca llegó a alcanzar la barrera de las 1.000 salas, y su recaudación fue de solamente 19 millones de dólares, una cifra muy pobre en comparación con la obtenida en otros mercados, su taquilla global alcanzó los 180 millones y solamente costó 30. “Lo imposible” llegó a los Oscars y obtuvo la nominación a la mejor actriz gracias al empeño de Naomi Watts que se dejó las pestañas dando a conocer la película y para ello se convirtió en la mayor canapera de esa temporada, habría sido una digna ganadora del codiciado Maris “Me apunto a la apertura de una lata de sardinas” porque su promoción fue impecable.

El espejo en el que se mira Focus es “El laberinto del fauno” de Guillermo del Toro, el padrino a nivel cinematográfico de Juan Antonio Bayona el mexicano fue uno de los productores de “El orfanato” y su figura fue fundamental para el lanzamiento internacional del film. Hace una década la película de Guillermo del Toro, producida también por Telecinco Cinema, llegó a los Estados Unidos de la mano de Picturehouse, compañía dependiente de la Warner, que para su campaña logró reclutar a Michele Robertson, que había diseñado las estrategias de “Million dollar baby” de Clint Eastwood y “Brokeback Mountain” de Ang Lee. Sus críticas en los Estados Unidos fueron extraordinarias, estuvo presente en la temporada de premios, llegando incluso a ganar el de mejor película de la Sociedad Nacional de Críticos (NSFC), y obtuvo 6 candidaturas al Oscar; mejor película en lengua no inglesa representando a México (fue la imposición del director a los productores españoles de ir a los Oscar representando a su país y no a España a pesar de que la historia, su reparto, parte de su equipo y capital procediese de nuestra piel de toro), mejor música, mejor guión original y ganó en los apartados de mejor fotografía, maquillaje y dirección artística. “Un monstruo viene a verme” no deja de tener elementos en común con “El laberinto del fauno”, ambas películas están protagonizadas por niños que están viviendo una experiencia muy dolorosa y que acceden a un mundo de fantasía.

Desde que "Un monstruo viene a verme" se estrenó mundialmente en el Festival de Toronto, Focus ha estado haciendo campaña en los medios de comunicación, aprovechando que en su reparto tiene a Felicity Jones, Sigourney Weaver y Liam Neeson y, por supuesto, a Juan Antonio Bayona que debutará en Hollywood con la dirección de "Jurassic world 2", de la que ha asegurado que será más oscura que su antecesora.

La apuesta principal de Focus para esta temporada de premios sigue siendo "Loving" aunque la cotización del film de Jeff Nichols lleva meses en descenso, prácticamente desde que se presentó en Cannes. Focus necesita realizar pases de "Un monstruo viene a verme", son dos los oficiales los que se hacen en la sede de la Academia y luego se permite la opción de alquilar un cine para la proyección del film, más que enviar screeners y copias digitales a los académicos. Porque su emoción es contagiosa, es toda una experiencia asistir a la exhibición de la película y que los espectadores moqueen al unísono en su clímax dramático. Ir a una sala de cine es maravilloso por los momentos de conexión entre un gran número de desconocidos que ríen, lloran o se asustan con la película que están viendo.

Siendo justa y sin ánimo de pecar de chovinista en "Un monstruo viene a verme" hay material que puede llegar a los Oscar, desde la dirección de Bayona, que se confirma como un excelente narrador de historias y también como un gran gestor de los recursos de los que dispone entre ellos la emoción, y en este último aspecto ha sido muchísimo más sutil que con "Lo imposible", a los apartados técnicos, pasando por el guión firmado por Patrick Ness el autor del libro en el que se basa. Y por supuesto a los interpretativos, Sigourney Weaver sería una digna candidata al Oscar a la mejor actriz de reparto, también Felicity Jones lo sería, y no hay que olvidarse de Lewis MacDougall, que confirma la capacidad del director de extraer petróleo de los niños. Connor, el protagonista, es un niño que está roto por el dolor y la ira de ver a su madre consumiéndose por culpa de la enfermedad, y la interpretación del actor escocés de tan sólo 14 años es realmente descarnada, es una de las mejores de este año y merece ser reconocida, pero lamentablemente los chicos tan jóvenes no tienen acceso a la categoría de mejor actor principal. Tan sólo lo logró Jackie Cooper a la edad de 9 años por "Skippy" y fue en el año 1931, ha llovido mucho desde entonces. Y lo más importante, la propia película. Siendo realista sus opciones más firmes están en los apartados técnicos y en el de mejor actriz de reparto, siempre dependiendo de lo despoblada que esté una categoría que está pendiente de la llegada de "falsas secundarias".

Vídeo

Mary Carmen Rodríguez