"El roce del tiempo"

La película de Richard Eyre "Iris" despliega ante nuestros ojos parte de la historia de Iris Murdoch, encarnada en Judi Dench. Para muchos, entre los que está Martin Amis, es la novelista inglesa más eminente de su generación y, para algunos, la más eminente de los novelistas de su generación (en términos absolutos, sin especificación de género). Fue el mismo Travolta quien le abrió la puerta, así que Martin Amis casi se dió de bruces con el mismísimo icono. Corría el mes de Enero de 1995 y aquella mañana habían empezado a rodar "Cómo conquistar Hollywood", basada en el thriller satírico sobre Hollywood de Elmore Leonard "Gran libro, gran película, gran día".

Título: "El roce del tiempo"

Autor: Martin Amis

Editorial: Anagrama

El cine tan solo es uno de los temas que nos ofrece Martin Amis, a su vez uno de los habitantes destacados del barrio londinense más cinematográfico, Notting Hill. Amis suele llamar estudio a la antigua vicaría donde vive; en realidad una mansión equiparable a la de otros multimillonarios. El tiempo ha sido tan generoso con Amis como con el barrio donde escribe y mantiene el estatus de uno de los mejores escritores de su generación.

Amis, a punto de los 70 años, tenía 10 cuando, en Agosto de 1958, un pequeño ejército de jóvenes blancos racistas a bordo de camiones y autobuses llegó al barrio para quemar y matar. A lo largo de varios años se habían asentado en Notting Hill varias oleadas de inmigración afrocaribeña. Fueron cuatro días de guerra devastadora y vergonzosa. Al año siguiente, los vecinos de Notting Hill quisieron enterrar el recuerdo de su Agosto más doloroso con una gran celebración pacífica y multicolor. Ese es el origen del carnaval de Notting Hill, sólo superado por el de Río de Janeiro. Más de un millón de personas se reúnen en la colina de Notting Hill cada Agosto. Tres días de música, baile, risa y alcohol.
Amis prefiere escapar del tumulto, ya investigó a fondo el ambiente de la zona para "Campos de Londres", la historia de un matón de poca monta, su personaje favorito, atrapado por su destino en los pubs de Portobello.

La tradición anglosajona de textos periodísticos literarios largos, alrededor de 10.000 palabras, alimenta recopilaciones excelentes. Esta de Amis lo es. Nos sitúa en periodos distintos y personajes tan variados como Donald Trump en su periodo de precandidato, profetizando que después de un par de días de pompa y circunstancia en la Casa Blanca, el cerebro de Trump no sería sino "un lodazal de testosterona"; asistimos con él a una final de la Copa de Europa en Barcelona, inmerso como uno más, en un paquete de aficionados y hooligans; a un paseo por la industria del porno norteamericana, de un explícito desbordante; o revivimos el impacto de la muerte de Lady Di, que puso en evidencia a la reina inglesa.

"En 2012, La impresión general auguraba, como mínimo, una repetición de la experiencia de la reina Victoria en el cincuentenario de su reinado (1887), cuando fue recibida en el East End londinense con lo que ella tachó de «un ruido horroroso» que no había oído en toda su vida: un abucheo. Pero no fue así. He aquí la crónica de Robert Lacey en su libro ejemplar Monarch: The life and reign of Elizabeth II: Cuando Isabel II, con negro atuendo, iba pasando ante la fila de súbditos dolientes, una niña de once años le tendió cinco rosas rojas.

- ¿Quieres que se las lleve en tu nombre? —le preguntó la reina.
- No, majestad -respondió la niña- Son para vos.
- Se oyó cómo la multitud se ponía a aplaudir -rememora un consejero de palacio-.

Recuerdo que pensé: «Dios, ya pasó todo.» Bueno, no del todo. Aún quedaba el discurso. La reina tendría que hacer todo lo posible para llegar a fingir que quería a la princesa Diana".

36 momentos y personajes de su Historia, algunos breves y otros extensos, que rememoran el pasado de un escritor con acceso privilegiado; trufado todo ello con preguntas, dudas y provocaciones de sus lectores, reunidos con él gracias a la facilidad de las redes sociales. Este salpicado a lo largo del texto de respuestas de Amis añade a la recopilación buenos elementos para conocer su pensamiento, su sentido del humor, la personalidad de Amis. Lo he leído de un tirón, pero también es perfecto para picoteo... y si es en compañía se hará inevitable comentarlo.

Carlos López-Tapia