"Hija del amor"
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Allegra Huston es editora, escritora, guionista y la menor de la camada Huston, si bien en realidad el director de cine no era su padre biológico, de lo que Allegra se enteró a los doce años. A partir de un artículo que le encargó la revista británica Harper’s Bazaar, titulado “La niña de papá”, se decidió a escribir estas memorias de infancia y adolescencia.
Título: “Hija del amor”
Autor: Allegra Huston
Editorial: Circe. Colección Fuera de serie
Nota de la Redacción: La temprana muerte de su madre, sus cambios de domicilio (de Inglaterra a Irlanda, y posteriormente a Nueva York y Los Ángeles), junto a la relación con John Huston y sus hermanos, formaron una personalidad sensible, retraída y observadora. Desde los primeros recuerdos infantiles, hasta la muerte de su padre y el nacimiento de su primer hijo para instalarse a vivir en Nuevo México, la autora combina sensaciones y recuerdos con buen equilibrio, ajena a las facilidades del escándalo pero sin esconder las dificultades por las que atravesó la familia. Emociones a veces secas, bien expresadas y compartibles o reconocibles. Allegra forma parte de ese club de “hijos de….” necesitados de alejarse del calor del talento y reconocimiento de sus padres, para recuperarlos años más tarde si han conseguido sobrevivir felizmente.
“Papá había lanzado la carrera de Anjelica con El honor de los Prizzi. Contaba con que Dublineses lanzara la de Tony; luego tenía previsto actuar en el primer largometraje dirigido por Danny, El maravilloso señor North”. ¿Y la pequeña Allegra?. La más joven de los Huston se sintió apartada, una espectadora con dos familias, más bien dos padres, y una hermana mayor, Anjelica, a la que todo el mundo admiraba, cuando no adoraba. “Me parecía mal ver a papá tan poco, y sólo cuando estaba enfermo. Incluso esa última Navidad, que iba a ser una celebración, se vio mermada con el habitual ingreso en la unidad de cuidados intensivos del CedarsSinai. ¿Estaba abandonándolo por mi familia inglesa?. Tony, Anjelica y Danny trabajaban con él, pero yo no pertenecía a ese mundillo. Solía describirme a mí misma como la rebelde de la familia, la única que había terminado la universidad y tenía un trabajo de oficina, pero era una fanfarronada. Papá no me necesitaba. Anjelica estaba allí para asegurarse de que lo atendían bien, y para llevarle comida de los mejores restaurantes cuando la comida del hospital le deprimía. Era yo quien lo necesitaba a él: necesitaba ser una buena hija en pago a su grandeza de espíritu por acogerme y quererme”.
El libro es una declaración de amor, de agradecimiento por una vida diferente, no siempre feliz, a menudo solitaria y atemorizada. Por la obra pasan personalidades reconocibles para los aficionados al cine, pero sobre todo se refleja una época vista a través de los ojos de una adolescente, y muy trabajada por la escritora adulta. El contraste con el carácter artístico y genial de su familia hizo que Allegra se sintiera muchas veces ajena, conectada con “su gente” sólo por una mujer bellísima, fallecida de forma trágica y prematura, a la que no pudo conocer: su madre. El relato es rítmico y uniforme, de manera que cualquier fragmento refleja adecuadamente la forma y el contenido. Hemos elegido éste para hacerlo….
