“Libreros de Nueva York”
La web oficial.
El argumento: Las librerías especializadas en obras antiguas y de coleccionista son un mundo pequeño y fascinante poblado por soñadores, intelectuales, excéntricos y obsesivos. Estos libreros son en parte académicos, en parte detectives y en parte empresarios. Sus conocimientos son tan amplios como el vasto material con el que trabajan y juegan un papel esencial, aunque poco reconocido, en la preservación de la historia.
Conviene ver: “Libreros de Nueva York” es un documental en donde D.W. Young quiere reivindicar la cultura del libro a través de las librerías especializadas en obras antiguas y de coleccionista. Se acerca a un mundo que resulta fascinante tanto por sus clientes que van en busca de una pieza única como de los libreros por ser tanto empresarios como académicos y detectives y en el que tanto unos como otros tienen el propósito de mantener viva la cultura y su legado histórico, una reivindicación oportuna en una era dominada por lo digital. Es un trabajo que no tiene una estructura, algo que no es un defecto ya que nos ayuda a meternos en la piel de esos cazatesoros que se van recorriendo los pasillos y las estanterías de las librerías dejándose seducir por lo que ofrecen. Vemos piezas tan codiciadas como el Códice Leicester, una recopilación de textos y dibujos científicos de Leonardo Da Vinci, de principios del siglo XVI, por la que Bill Gates pagó 30 millones de dólares en una subasta, y entre las más extrañas se pueden encontrar encuadernaciones hechas con carne humana. En él intervienen subastadores, coleccionistas y escritores como Fran Lebowitz. No es un trabajo novedoso pero sí que resulta de un gran atractivo enarbolando la nostalgia por el papel, la minuciosidad de las encuadernaciones y ese olor fascinante de librería vieja y llena de libros con ediciones ocultas y raídas por el tiempo que configura una burbuja llena de curiosidades, intrahistorias y evasión frente al mundo exterior. Hora y media de defensa de la cultura y del poder evocador de este tipo de establecimientos que parecen estar condenados a ser un vestigio del pasado para eruditos, estudiosos e inquietos culturales.
Conviene saber: Debut de D.W. Young en el terreno documental.
La crítica le da un SEIS