Venecia 2009: Romero saca los zombis a pasear, los ideales del 68 y por un Irán libre

Querido Teo:

¿Una de zombis de George A. Romero en el Festival de Venecia?. El asombro crece cuando se la ve como una de las integrantes de la Sección Oficial de esta edición. Por ello, muchos medios han pedido la cabeza del director del certamen Marco Müller al programar una película tan alejada de la tendencia festivalera. Y no es que Romero haya cambiado un ápice su estilo, ha sido Venecia quien se ha adaptado al director y no el veterano realizador al estilo de las películas que suelen verse por la Mostra. Una nueva cinta de zombis en la que los "no muertos" pululan por un escenario con aromas de western. En "Survival of the dead", Romero lleva a cabo un auténtico disparate en el que dos hombres, procedentes de familias irreconciliables, se vuelven a encontrar ante la duda de si es mejor dejarlos con vida (a pesar de que estén muertos) o meterles un balazo entre ceja y ceja a ver que pasa. De fondo agricultores, ganaderos y forajidos en una cinta que es ideal para estas alturas de certamen en el que los que siguen viendo películas sin hartazgo son, ya de por si, unos auténticos "no muertos" que subsisten a dos días de que termine el Festival. Cuando Romero le ha pretendido sacar interpretaciones políticas relacionadas con la crisis económica el mundo ya ha alcanzado grandes dosis de cachondeo.

Michele Placido ha presentado una película italiana, con el fin de enderezar un poco el rumbo que había alcanzado el Festival con la aparición de Romero. En "Il grande sogno" nos recuerda los ideales del Mayo del 68, momentos que él mismo vivió en primera persona cuando se cambió de bando después de haber pertenecido a las fuerzas del orden para pasar a identificarse con los ideales de las protestas estudiantiles. Eso se nota y Placido recorre con nostalgia esa época a través de la historia de amor de un joven y una chica de clase acomodada. A Placido se le acusó de que a pesar de ser director de izquierdas su película cuenta con la producción de Medusa, empresa de Berlusconi. Placido, algo indignado, ha recordado que buena parte de las producciones italianas cuentan con el apoyo de Medusa al ser la más potente del país dentro de su ramo.
La cinta juega con el recurso del triángulo amoroso y, aunque no ha decepcionado, se puede decir que el director de "Romanzo criminale" se ha quedado anclado en un rol de "abuelo cebolleta" a la hora de contar esos ideales de finales de los sesenta que parecían que iban a comerse el mundo. Se vislumbra el desengaño y la decepción de una época que no termino de fructificar. Los discursos de Luther King, la foto de la niña regada de napalm o las canciones que marcaron esa época no son más que recursos fáciles que ya se han visto muchas veces en el cine. Y es que muy pocos directores que vivieron con pasión esos años se han resistido a ofrecernos su particular mirada, echándose de menos más personalidad y menos lugares comunes. Entre otros, la película está protagonizada por Riccardo Scamarcio, el "terror de las nenas" en Italia.

El día se ha completado con "Whomen without men" inspirado en un libro prohibido de la escritora iraní Shahrnush Parsipur y narra la lucha de tres mujeres por alcanzar la libertad en los tiempos del Sha de Persia. La cinta de Shirin Neshat no ha podido evitar estar relacionada con las recientes revueltas en Irán siendo, según la directora, todo un canto para la libertad del pueblo iraní. Queda como una reflexión del difícil papel de la mujer en esas zonas a lo largo de toda la Historia que ha pasado por Venecia con bastante discreción.

Nacho Gonzalo (Coronado)