Recordando clásicos: "El golpe" (1973), química y carisma para la pareja masculina más icónica

Recordando clásicos: "El golpe" (1973), química y carisma para la pareja masculina más icónica

1 Sarcofago2 Sarcofagos3 Sarcofagos4 Sarcofagos5 Sarcofagos (3 votos, media: 5,00 de 5)
Cargando...

Deja tu comentario >>

Querido Teo:

Seguro que os suena la música que estáis escuchando, la habréis oído en anuncios, en tonos de móvil y, por supuesto, también os recordará la película que la hizo mundialmente famosa. Hoy traemos "El golpe" (1973), la película más conocida de George Roy Hill con el permiso de "Dos hombres y un destino" (1969). Y es que este director debería de pasar a la historia ya sólo por haber unido en pantalla, dos veces, a la pareja con más química del cine: Paul Newman y Robert Redford.

"El golpe" se estrenó en una época en la  que convivían el nuevo Hollywood con sus aires de modernidad y los clásicos a la vieja usanza. Aquel año Woody Allen dirigía su quinto largometraje, "El dormilón", Martin Scorsese metía la cámara hasta la cocina de los bajos fondos en "Malas calles", y "El exorcista" revolucionaba el género de terror. Sin embargo "El golpe" fue concebido con todos los elementos para convertirse en un clásico: reunió de nuevo el tándem rompetaquillas formado por Paul Newman y Robert Redford, los arropó con un elenco de secundarios que no tiene desperdicio y les puso enfrente un villano a su altura, cuyo apellido le costaba recordar a Newman.

La película está ambientada en 1936 en Chicago y alrededores, la historia comienza con  un joven timador de poca monta llamado Johnny Hooker, al que da vida Robert Redford. Éste sobrevive perpetrando pequeños timos con su socio Luther (Robert Earl Jones). En uno de sus trabajos, sin saberlo, le roban el dinero al correo de Doyle Lonnegan, un capo de la mafia de Chicago. Lonnegan se entera de quién le ha robado y acaba matando a Luther, mientras Hooker se salva milagrosamente.

Este incidente se convierte en la motivación del protagonista y pone en marcha toda la trama. Hooker va al encuentro del “rey de  los timadores”, que no podía ser otro que Paul Newman (alias Henry Gondorff) y le pide ayuda para destruir a Lonnegan, pero antes el maestro tendrá que enseñarle unas cuantas cosas al alumno.

El impulsor de "El golpe" fue su guionista David S. Ward que escribió la historia apoyándose en el libro "The big con" de David W. Maurer y en un timo real que llevaron a cabo en 1914 dos hermanos, Charles y Fred Gondorff (de hecho el apellido Gondorff se mantiene en la película). El director que se hizo con el proyecto fue George Roy Hill, en su haber contaba entre otras películas con "Dos hombres y un destino" (1969) y la adaptación cinematográfica de la novela de Kurt Vonnegut "Matadero cinco" (1972).

En la búsqueda de protagonistas, recurrió de nuevo a Redford y Newman, ambos se hicieron de rogar porque no querían repetir el esquema del western que habían interpretado juntos, pero finalmente terminaron liderando el proyecto. Como el villano Doyle Lonnegan, el elegido fue el británico Robert Shaw, que daba el pego como gangster irlandés. Además su repentina cojera, fruto de un accidente inesperado, le dio aún más empaque a su personaje.

El filme se divide en una introducción y seis capítulos separados por carteles con los títulos de cada parte: Los protagonistas. El plan. El tinglado. La trama. Una sucesión de pasos encaminados a preparar el golpe del título. Ese gran timo con el que quieren hacer morder el anzuelo a Doyle Lonnegan, el pez más gordo de la pecera en la que nadan todos los delincuentes de Chicago.

"El golpe" logró ganar 7 Oscar. Entre ellos el de mejor montaje, dirección artística por su escenografía y decorados y también el de vestuario. El trabajo de los departamentos artísticos fue reconocido por crear ese mítico Chicago gansteril de los años 30. También obtuvo las codiciadas estatuillas a mejor película, director y guión original.

Y mención aparte merece la banda sonora de "El golpe", que fue un acierto indiscutible. La pieza titulada The entertainer se convirtió en el sello de identidad de la película. Para crearla se eligieron las composiciones para piano de Scott Joplin, un músico negro fallecido en 1917, que había desarrollado y perfeccionado el ragtime. Los arreglos corrieron a cargo del compositor Marvin Hamlisch, que también ganó el Oscar a la mejor banda sonora adaptada. Aunque se trataba de melodías más antiguas que la época en la que se ambientaba la historia, resultó ser el acompañamiento perfecto para un film al que aportó ese tono dinámico y desenfadado, que casaba muy bien con el carácter de los "granujas" que retrataba.

El resto ya es historia, la segunda y última colaboración de Paul Newman y Robert Redford quizás os deje con ganas de más, pero merece la pena asistir en primera fila a este golpe tan bien planificado que en breve cumplirá 50 años.

Y nada más por hoy, sólo recordaros que siempre es un acierto revisar los clásicos.

Mónica Balboa (https://cineenunminuto.com/

¿Compartes?:
  • email
  • PDF
  • Print
  • RSS
  • Meneame
  • del.icio.us
  • Facebook
  • Google Bookmarks
  • Twitter
  • FriendFeed
  • LinkedIn

Comentarios

Suscríbete
Notificar
guest
1 Comentario
El mas antiguo
El mas reciente El mas votado
Comentarios en línea
Ver todos los comentarios
Willowi
Willowi
1 año atrás

Acertadísimo recordatorio de una de las películas imperecederas de la historia del cine, la tengo en el podio de mis tres películas preferidas, de las pocas películas que aunque ya la hayas visto, la empiezas a ver y te vuelve a enganchar hasta el final,
Destaco la impresionante decoración artística, la dirección, nunca más George estuvo tan inspirado, y por encima de todo el espectacular y perfecto guion, sin este no se puede realizar una buena película.

0
Me encantaría conocer tu opinión, comenta.x
()
x