Querido primo Teo:
David Fincher, un director que ha rozado el Óscar con sus dos últimas cintas, "El curioso caso de Benjamin Button" y "La red social", consigue convencer de la necesidad de una nueva versión de "Millennium", el best-seller del sueco Stieg Larsson, haciendo creíbles a sus protagonistas, Daniel Craig y Rooney Mara. "Fincher es un cruce entre (Stanley) Kubrick y (Alfred) Hitchcock al que se añade un sentido visual y musical que viene de un lugar muy personal", ha señalado el actor británico a EFE, en una visita promocional a Madrid junto al resto del equipo. "Los hombres que no amaban a las mujeres", la primera parte de la trilogía de Larsson (1954-2004) que adapta la película de Fincher, fue uno de los libros más vendidos de la historia, al igual que sus continuaciones "La chica que soñaba con una cerilla y un bidón de gasolina" y "La reina en el palacio de las corrientes de aire". Estas novelas ya fueron trasladadas al cine hace tres años por el realizador danés Niels Arden Oplev y el sueco Daniel Alfredson, con los actores Michael Nyqvist y Noomi Rapace como protagonistas, pero eso no le preocupa al director estadounidense. "No sé por qué acepté hacer esta película, sólo pensé que había una relación muy interesante entre un hombre y una chica, muy distinta a las que ya estaban vistas, en cualquier caso, no me importó nada que hubiera una versión anterior", ha indicado a EFE. Tampoco se siente intimidado el Blomvist de la versión estadounidense: "Lo veo como un reto, y la oportunidad de hacer una película con Fincher lo podía todo, además, poder dar a conocer esta historia a más gente me parecía excitante". El "007", que no vio la película sueca, lloró al ver la actuación de Rooney Mara, tras comprobar "la habilidad con la que aceptó este reto, su interpretación tan sutil, con tanto movimiento... realmente 'es' ella", ha considerado. El director ha conseguido una espectacular simbiosis con la obra de Larsson, de la que el guionista Steven Zaillian (Oscar por "La lista de Schindler"), ha mantenido completamente su esencia a pesar de tener que reducir 640 páginas.