"Si Dios quiere"
La web oficial.
El argumento: Tommaso, un cardiólogo de fama, es un hombre de firmes creencias ateas y liberales. Está casado y tiene dos hijos. Uno de ellos, Andrea, prometedor estudiante de medicina, revoluciona a la familia cuando les anuncia que quiere hacerse cura.
No conviene ver: “Si Dios quiere” es una película que tira de la convencionalidad de la trama y de sus personajes apostando más por la comedia costumbrista que por la crítica. Y es que otros maestros italianos de hace décadas hubieran sacado más petróleo a este choque de caracteres, generacional y de creencias. Todo parte de la reunión a la que un hijo convoca a sus padres, asumiendo estos que se trata de su salida del armario cuando en realidad lo que les cae como un arma arrojadiza es su ingreso en un seminario. Y es que… ¿a veces la presumible liberalidad progresista no termina siendo más dogmática que la propia religión? Lo mejor es el duelo entre el cardiólogo de prestigio Marco Giallini y el sacerdote snob de Alessandro Gassman. Funciona mejor en el choque dialéctico inicial que acaba derivando en una película convencionalista y ensalzadora del sentimiento de la fe en un mundo hedonista y de poco sacrificio. Simpática y evasiva pero deja regusto amargo por el hecho de que es una triste sombra de lo que ha sido la comedia italiana de toda la vida y recuerda al estilo de cintas como la francesa "Dios mío, ¿pero qué te hemos hecho?".
Conviene saber: Edoardo Maria Falcone ganó el premio al director revelación en los David di Donatello 2015.
La crítica le da un CUATRO