
¿Y si no, qué?
Querido Teo:
La irrupción en horas del nuevo impuesto de valor añadido, un puro impuesto al comercio de bienes y servicios, dispara la alarma en el mundo del negocio cultural. La carta adjunta que nos ha llegado a la Redacción es la prueba. Los cálculos son los siguientes: pérdida de 4.500 puestos de trabajos directos, que significativamente no es la primera cifra que incluye la carta entre las pérdidas, de 43 millones de espectadores, reducción de 530 millones de euros en los ingresos en taquilla, y cierre del 20% de las empresas de la industria cultural (música, cine y artes escénicas).