Sesión de cine-cebolla: “Senderos de gloria”
Querido primo Teo:
Ha pasado a la Historia como un director subversivo y provocador, pero en el cine de Stanley Kubrick también había lugar para la emoción. "Senderos de gloria", uno de los mayores alegatos antibelicistas que se han visto en el cine, es probablemente la película con más corazón del director británico. Pero eso no significa que Kubrick dejara pasar la oportunidad de meter el dedo en la yaga, lo que hizo que la cinta no estuviera exenta de polémica (en Francia estuvo prohibida durante dos décadas). Aunque Kubrick ya había demostrado su talento en "Atraco perfecto" (1956), "Senderos de gloria" (dirigida con tan sólo 28 años) marcó un antes y un después en su carrera. Kubrick rodó de una forma tan moderna que vista hoy cuesta creer que sea una película de los años 50, metiendo la cámara en las trincheras de un modo que nunca antes se había visto. Como no podía ser de otra manera, Hollywood puso sus ojos en él, y su siguiente proyecto sería una producción tan ambiciosa como "Espartaco".