La Tierra Media en Galicia (II)

Querido primo Teo:

Después de mi periplo por Santiago, llegamos a La Coruña con ganas de seguir surcando la Tierra Media en esta exposición que se puede ver en Galicia hasta el próximo 16 de Septiembre.

En el medio del paseo marítimo, que corresponde al puerto, nos encontramos con, NO, no con la sede de la Coruña de la expo, sino con la sede, la feria del comic, y un rally de coches antiguos, un 3 por 1 digno de cualquier centro comercial.
Tras ver el rally, y gastarnos algunas perras en la feria del comic, entramos en el hipermoderno edificio de Caixa Galicia en la Coruña, flanqueados por dos posters con los argonath. Dentro, la típica tienda de recuerdos, que de no ser porque había de otras exposiciones, estaría mas bien vacía, (tanto que los dos últimos bolis, si he dicho bolis, los compramos nosotros). Aquí, al contrario que en Santiago, tenemos, cual nómada del desierto, un harén de azafatas, que nos indica el camino, (algo confuso por el tema de bajar, para subir, y después bajar...) y nos repiten el consabido: "no se pueden hacer fotos". Siguiendo sus sabios consejos, bajamos al sótano 1, donde, para nuestro placer, nos recibe Barbol, , o mas bien un cacho, porque solo es el busto, pero que podrías pegar en cualquier árbol del parque, y ni se notaria. Hay que ver que detallistas son estos tíos de Weta, parece un árbol de verdad, de hecho, hasta lleva trozos de uno según la inscripción. Pero justo enfrente de nuestro querido Ent los anteriormente conocidos como posters de los argonath, se tridimensionan en dos esculturas enormes que flanquean el la entrada, (a estas alturas ya podéis suponer, la de redioses y lagrimas que había echado yo por no poder hacer fotos).

Entrando en las salas (cuatro en total), estuvimos a punto de salir otra vez, porque, encontrarte de morros con un troll, babeante con una cachiporra mas grande que tu puede asustar, (aquí me imagino entrando a la tía de la limpieza el primer día, con todo a oscuras y sin un alma jijijiji) Bueno, de esta escultura, es que no se me ocurre ni que decir, el detalle al máximo, la boca húmeda del troll, el esqueleto polvoriento del enano en el suelo...esto hay que verlo, es indescriptible.
Justo al lado estaba su hermano pequeño, en pelota picada (partes nobles incluidas al detalle) y listo para ser escaneado con el láser para hacer el modelo digital, tal y como te explican en una vitrina al lado, con la cabeza lectora incluida (al precio que están esos cacharros, seguro que era una que se les achicharro de tanto escanear.)

En esta sede, las esculturas tamaño real y las "magnaturas" dominan el resto de la exposición, que solo difiere de la anterior en la cantidad y variedad de material. Aquí, además de las consabidas vestimentas "estándar", tenemos amuchas mas principales. Theoden, increíble el trabajo en cuero y el casco de esta armadura, Galadriel, un vestido blanco, sin apenas un trocito sin bordar con piedrecillas brillantes, Arwen, con dos vestidos sencillos pero muy chulos, el traje de Gandalf el blanco, y el de Saruman, con sus bastones, al ladito de unas representaciones de sus escritorios, palantir incluido, (que pedrolo más guay).

El traje de montaraz de Aragorn, zurcido por el mismísimo "leones" Viggo Morttensen, raído y manchado como en el film, y un nazgul extendiendo su mano hacia el espectador, al lado de una vitrina con los enseres de su caballo etc.
Pero como no, lo que mas impresionaba eran las maquetas y las esculturas. Aquí he de recomendar a Luthien que no vaya a ver la expo, a riesgo de salir traumatizada y llorando, porque si ve a Boromir en la barca muerto, la da un algo fijo. Nunca había tenido mas sensación de velatorio. El realismo de este maniquí, o lo que fuera, era escalofriante, los rasgos perfectos, pelo natural, los ojos cerrados y algo amoratados. Y las mano...como en casi todos los velatorios, le mirabas y parecía ir a levantarse en cualquier momento, y con todo: su escudo, el cuerno de gondor partido, etc.

Siguiendo con estos "maniquíes", también encontramos a Lurtz, también como el resto, a puntito de saltar de la tarima, y al ladito de mas prótesis de orcos y de hobbits, al mismísimo Sauron, que para lastima mía, no media 3 metros, sino que llegaba a 2 gracias a los pinchos del casco. Pero bueno, pa eso están los Fx..
Y en el tema de maquetas, también muy bien en esta sede, El molino de Hobbiton, y las dos torres. El primero, para solo salir 2 segundos, esta hecho al milímetro, con tuberías saliendo etc...y las torres, qué decir de los iconos del film en unas "miniaturas" de casi tres metros de altura.

En esta sede, también encontramos por las paredes a Alan Lee, pero esta vez en compañía de John Howe, con otros dibujos que ya los quisiera yo en mi casa.
Otra cosa muy graciosa de esta expo que se me estaba pasando, es la posibilidad de tocar..si si, tocar algunas de las armas y armaduras, para ver la diferencia entre las artesanales, las de pegarse, y las de atrezo. Curioso pero resultón, todos íbamos a tocar como corderitos.

Y otro reclamo es la sala donde te explican las técnicas de como hacer las diferencias de tamaños, con la perspectiva forzada (usada ya por todos nosotros, profesional, y amateur: quién no se ha hecho una foto sujetando en la mano un objeto lejano, digamos un coche o la torre de pisa) o la mas novedosa de croma para el carromato de Gandalf esta ultima usada magistralmente para sacarle perras a la gente, sentándola y haciéndoles una foto, donde tu compañero de asiento era tu padre, amigo, o novia convertido en hobbit (por cierto, las tenían mal calibradas y no quedaban bien las líneas, tenia que decirlo).

Salimos ya dispuestos para iniciar más aventuras, pero el sueño había terminado. Nuestro viaje por la Tierra Media había tocado a su fin pero la experiencia quedará siempre en nuestro pequeño corazón de hobbit.

Tu primo.
Valthalion