Querido primo Teo:

Quién nos iba a decir que “Top Gun: Maverick” se iba a convertir en el gran acontecimiento cinematográfico de este 2022 y es realmente curioso porque se trata de una secuela más que tardía del clásico ochentero que convirtió a Tom Cruise en una superestrella y segundo porque es una película que se rodó hace cuatro años, antes de que el mundo quedara paralizado por una pandemia y de que la exhibición cinematográfica se adaptara a un modelo híbrido. “Top Gun: Maverick” es un evento en torno a la explotación de la nostalgia, nada nuevo en una industria audiovisual que se ha abonado a exprimir los productos que le han funcionado, que destaca por su componente sentimental especialmente con Val Kilmer. Su participación en el film es sobrecogedora, no solamente porque vemos a alguien que ha sido devorado por una enfermedad y que de alguna manera se está despidiendo sino porque con esa secuencia, cargada de emotividad y el hecho de que sea el primero en aparecer en los créditos finales, Hollywood está reconociendo la contribución de alguien cuyo talento no supo apreciar. 

Querido Teo:

* A sus 80 años Morgan Freeman recibirá el reconocimiento de sus compañeros de profesión con el premio honorífico del Gremio de Actores (SAG) que se celebrará el próximo 21 de Enero de 2018. Ganador del SAG y del Oscar en 2005 por “Million dollar baby”, fue también candidato a este premio por “Cadena perpetua” en 1995 y por “Invictus” en 2010. En la ceremonia de los Globos de Oro de 2012 ya recibió el premio Cecil B. DeMille. Puedes consultar la lista completa de ganadores del SAG honorífico.

Querido Teo:

Aunque no lo creas, la semana pasada después de salir de mi visita diaria a la Filmoteca, volví a replantearme mi fe. Sí, sí, ésa que abandoné a los 13 años cuando mis padres en la mejor decisión en lo que a mi educación se refiere, decidieron sustituir a mi anterior institutriz por una más joven (que dicho sea de paso, tenía mucho don de lenguas). Había tenido una revelación, y tenía que llegar hasta el final, costase lo que costase. Nada más llegar a casa, llamé de forma urgente a mi mayordomo para que preparara el jet privado y solicitara una audiencia de urgencia con su Santidad, puesto que tenía que aclarar con él una de las grandes injusticias de la Historia.