Venecia 2004: buzos, travolta y fiestas.

Querido diario:

La clínica debería hablar mucho de la eutanasia cuando se difunda el virus "Mar adentro" y hasta el "Venas" se va a colar en casa de Amenabar para que cuente su historia. Ahora me la está contando a mi y es más inaguantable que tropezarse con un overbooking en Agosto. Para que no le de el "tic" de baba y se electrocute con mi máquina para calambres, hago que le escucho y desconecto revbuscando en el portatil de A/C Martínez en Venecia.

"Hoy todo ha empezado con comida. Primero el "primo pranzo" que es como llaman aquí al desayuno y ahora me tengo que comer mis propias palabras de ayer sobre la "cosa" de los 61 leones sobre sus columnas. Cambian completamente por la noche, porque se iluminan por dentro y el resultado es espectacular y precioso. A estas viejas ciudades italianas les sienta bien la noche, como a las damas ancianas.
Comentaba también ayer lo de la seguridad. Pues bien, la gala de inauguración empezó una hora tarde, porque se presentó un aviso de bomba en el embarcadero del Excelsior. Todos tuvimos que esperar a que los buzos salieran del fondo y aseguraran que era una falsa alarma.

Se dio el pistoletazo de salida con "Delivery", una "peli" griega angustiosa y amarga que cuenta la historia de un pizzero que llega a Atenas a buscarse la vida. Enseña una Atenas espantosa, la otra cara de la imagen que nos ha enseñado las Olimpiadas. No es fácil que se estrene en muchos países, y su única oportunidad sería ganar un premio menor. Es posible que lo consiga porque es rara y hasta el director defiende su rareza.

Luego me metí a ver la de "5 x 2", que también apunté ayer. Es la historia de una pareja divorciada contada hacia atrás. Estilo francés, buenos diálogos y buenas interpretaciones. Cine inteligente del que manejan bien los franceses. Pienso que se estrenará en España.

Y de postre ya he visto la mueva versión de "El mensajero de el miedo". Dirigida por Jonathan Demme, el de "el silencio de los corderos". Es una crítica acojonante a la forma de hacer política de los USAmericanos, no me extraña que esté levantando ampollas ahora mismo allí, en plena campaña. Los republicanos estarán mosqueados. Meryl está tremenda, te entran ganas de estrangularla, aunque a mi me recuerda más a la Thacher que a Hillary. Soberbia Meryl, que en la rueda de prensa ha estado bien, simpática, mientras que Denzel muy soso y desganado.

Travolta ha llegado al más puro estilo Hollywood, pilotando su propio avión, séquito de 20 personas, incluida familia. Ha cogido toda una planta de uno de los hoteles más caros. Le han aplaudido mucho y de momento más estrella que nadie. Se dará una vuelta con su amigo Tarantino que también anda por aquí, sin que hayamos visto a Sofía.
Tom Cruise será la estrella de mañana con su "Colateral".
Me entero, y lo flipo claro, que han cedido ¡el palacio ducal!, para una fiesta estilo Renacimiento que celebrará el pase de la película de Al Pacino, "El mercader de Venecia", alucino. Será la fiesta de las fiestas, para vips muy muy vips. El resto de los mortales corrientes, nos conformaremos con ir a la única fiesta abierta. Será en la playa y organizada por un grupo antiglobalización a la que ha venido expresamente Tim Robbins, muy enrollado y comprometido.
El tiempo es muy bueno y me imagino la laguna preciosa. Los "gnocci" a la veneciana con salsa de tomate y almejas que acabo de engullir estaban buenos, y me tendrán que durar hasta esta medianoche, de la que me separan dos nuevas películas".