“Monster´s ball” es una de esas pequeñas películas a la que el tiempo le ha hecho destacar todavía más sus dos características más reconocidas. Fue la película por la que Halle Berry consiguió un significativo Oscar a la mejor actriz, el primero en la categoría protagonista para una intérprete negra, en la gala más afro ofrecida por la Academia, y también es la cinta en la que en sus fotogramas encontramos una de las escenas de sexo más descarnadas, ardientes e impulsivas de la Historia del cine. Es la que protagonizan Berry y Billy Bob Thornton como vía de escape a una desesperación casi congénita fruto del entorno en el que viven.
“Monster´s ball”, que por su crudeza y sucia atmósfera a punto estuvo de quedarse en un cajón sin posibilidad de distribución, ve sobrevolar sobre ella la presencia de la muerte como un ente constante. Hank y Leticia son dos seres anónimos que ven como la muerte les sigue golpeando después de que un tercero que une a los dos sea ejecutado en la silla eléctrica. Y es que el marido de Leticia es ejecutado de esta manera en un pequeño pueblo del estado de Louisiana en el que Hank forma parte del equipo policial del corredor de la muerte. Ambos se sienten culpables del devenir de los acontecimientos y su encuentro sexual (racial en un Estado en contra del mestizaje) es, más que una atracción física de ambos, una necesidad de comprensión y de vía de escape que no pueden obtener con nadie más en ese momento de sus vidas. Un polvo duro, sin concesiones, y desesperado, primario, y puramente animal.
* Laurent Cantet ha sido uno de esos directores que no sólo ha destacado por su cine sino también por su humanismo, confiando en el cine tanto en el valor de la educación como de valores éticos para hacer un mundo mejor. De ello está lleno una filmografía que fue coronada con “La clase” (2008), una de las Palmas de Oro de Cannes mejor valoradas con el paso de los años y casi emblema de toda una temática de películas desarrollada en las aulas. Un cáncer ha frenado en seco una carrera y una vida a los 63 años en la cual todavía tenía mucho que ofrecer.
“El gatopardo” de Luchino Visconti fue estrenada en Roma el 27 de marzo de 1963, hace por tanto más de 60 años, una de las obras capitales del director desde el punto de vista artístico y claro ejemplo de su perfeccionismo. Semanas después ganaría la Palma de Oro del Festival de Cannes convirtiéndose en un título que supo retratar como pocos no sólo la exquisitez y la decadencia del ambiente que pretendía retratar sino también la propia condición humana.
El pasado 10 de abril de 2023 se cumplieron 25 años del Acuerdo de Viernes Santo, o de Belfast, que fue firmado por los gobiernos británico e irlandés y que fue aceptado por la mayoría de los partidos políticos norirlandeses para poner fin al conflicto de Irlanda del Norte. Dicho acuerdo también fue refrendado por el pueblo de Irlanda del Norte y la República de Irlanda. El conflicto norirlandés enfrentó a los unionistas, de religión protestante, que querían mantener sus lazos con Gran Bretaña, con los republicanos irlandeses, en su mayoría católicos, que querían integrarse en la República de Irlanda con la que de manera mayoritaria comparten religión.
El gran estreno de esta semana es la miniserie documental “Silencio en plató: El lado oscuro de la televisión infantil” que expone los abusos sexuales cometidos en la factoría Nickelodeon, eso nos lleva a dedicar nuestros clásicos y joyas a un tema que desgraciadamente sigue siendo tabú.