"Karate Kid: Legends"
La web oficial.
El argumento: Tras una tragedia familiar, el prodigio del kung fu Li Fong se ve obligado a abandonar su hogar en Pekín y trasladarse a Nueva York con su madre. Li lucha por dejar atrás su pasado mientras intenta encajar con sus nuevos compañeros de clase y, aunque no quiere pelear, los problemas parecen encontrarle en todas partes. Cuando un nuevo amigo necesita su ayuda, Li se presenta a una competición de karate, pero sus habilidades no son suficientes. El profesor de kung fu de Li, el Sr. Han, pide ayuda al Karate Kid original, Daniel LaRusso, y Li aprende una nueva forma de luchar, fusionando sus dos estilos en uno solo para el enfrentamiento definitivo de artes marciales.
Conviene ver: “Karate Kid: Legends” es una cinta dirigida a los nostálgicos de la película más icónica sobre el mundo del kung fu que une por tanto al Jackie Chan de la película de 2010 (heredero del mítico Pat Morita) y a Ralph Macchio, el inolvidable Daniel LaRusso de la original. Formularia, simple y hasta molesta por su intento descarado de no aportar nada de creatividad sin querer salirse ni un centímetro del carril previsto. Entretenimiento familiar en una película poco inspirada y pobre en lo argumental quedándose en un caos algorítmico mucho menos efectivo y atractivo de lo que podría pretender sobre el papel con la llegada de una joven promesa del kung fu de Pekín a Nueva York y que, sufriendo acoso, tendrá que superar sus problemas, envalentonándose y enfrentándose al macarra acosador puliendo sus habilidades mientras se prepara para un torneo de artes marciales contando como mentores con dos referencias de la lucha de estilos y caracteres diferentes y con un nexo y pasión común. Una película que ni los muy fans estaban esperando y que no es más que un descarado “revival” para exprimir una historia que ya tuvo su tiempo y que no ayuda a que con esta cinta se extienda su legado a la hora de difundir el karate como metáfora vital, ejemplo de buenos valores y disciplina así como analogía de superación, camaradería y respeto. Un camino hacia la redención y a encontrar un propósito vital que no sorprende y que tampoco tiene la fuerza emocional del vínculo que construyeron en su momento Daniel LaRusso y el Sr. Miyagi siguiéndose punto por punto el esquema narrativo del referente. Un remake funcional con buenas escenas de acción, su pincelada romántica y mucho de trabajo en equipo a la hora de superar los límites que nos autoimponemos siendo capaz de unir con solvencia los diferentes universos y caminos que sucedieron a la cinta de 1984 lo que no deja de ser una delicia para los fans, rindiendo tributo al pasado y actualizándolo a las nuevas generaciones, pero, lamentablemente, todo ello no es suficiente para sostenerse por sí misma y desde luego entre el original y la copia nos quedamos con lo primero.
Conviene saber: Jonathan Entwistle dirige la cinta que sigue la estela del clásico ochentero “Karate Kid” (1984) iniciado por John G. Avildsen y que dio para tres secuelas (1986, 1989 y 1994) y un remake (2010) así como la serie de televisión “Cobra Kai” (2018-2025), iniciada en YouTube y adquirida posteriormente por Netflix, de la que también se nutre esta cinta.
La crítica le da un CINCO













