Querido Teo:
* La admisión de "Las aventuras de Tintín: El secreto del unicornio" para optar al próximo Oscar de animación ha vuelto a despertar el debate sobre la motion capture, la técnica de captura de movimientos que a través de unos sensores digitaliza las expresiones faciales y físicas de actores en carne y hueso. La Academia, como toda institución, siempre va por detrás de los cambios y, hasta ahora, no consideró a esta técnica como elegible en esta categoría. Ya lo sufrió en sus propias carnes Robert Zemeckis que vio como “Polar express” (la pionera en esta técnica) no pudo ser elegible para optar al Oscar de animación. Ahora, sea porque los tiempos cambian o porque a Spielberg no se le niega nada, vemos como cintas como “Las aventuras de Tintín: El secreto del unicornio” (acompañada de otras como “Marte necesita madres” o “Happy feet 2”) si que podrán optar a ese Oscar. Ahora viene la segunda cuestión, ¿los actores que se prestan a esa técnica merecerían la nominación al Oscar?. Se ha debatido muchas veces y siempre con el mismo nombre en liza, el de Andy Serkis. Ante el éxito en los Oscar de “El señor de los anillos” (y antes de que surgieran los grupos de Facebook y los Trending Topic de Twitter) la comunidad cinéfila ya reclamaba una nominación por su Gollum. Este año, y ante el inesperado éxito crítico y taquillero de "El origen del planeta de los simios", Fox no ha dudado en comenzar a promocionar a Serkis para el Oscar por su simio César. Mientras, otras voces suscriben esto destacando su buen trabajo como Capitán Haddock en la última de Spielberg. Pero siendo los Oscar como son actualmente estas campañas no suponen más que dinero perdido.