"April"
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La web oficial.
El argumento: Tras la muerte de un recién nacido durante el parto, la moral y la profesionalidad de una ginecóloga, Nina, se ven sometidas a escrutinio entre rumores de que practica abortos ilegales a quienes lo necesitan.
Conviene ver: “April” es lo nuevo de la directora Dea Kulumbegashvili que tiene como protagonista a Nina, una ginecóloga que practica abortos clandestinos en el entorno rural y que, tras la muerte de un bebé durante un parto, comienza a ser señalada por su profesión destapándose sus prácticas. Una mujer que se juega su puesto de trabajo y que, a pesar del posible castigo, no cesa en su empeño de ayudar a las mujeres que acudan a ella y que se encuentran abandonadas por sus familias y por una sociedad que pretende esconder el problema más que acometerlo. Ia Sukhitashvili da vida a una mujer que ni siente ni padece y que actúa como un autómata entre el inhóspito hospital en el que trabaja, sus encuentros sexuales furtivos con desconocidos y sus viajes a aldeas perdidas con el fin de poder ayudar a aquellas desfavorecidas que buscan huir del estigma. En su segunda película, Kulumbegashvili ha logrado deslumbrar por su denuncia social planteada de manera poética, volviendo a su Georgia rural y recurriendo nuevamente a su imperturbable protagonista y a un planteamiento austero y desolador encuadrado en planos fijos, secuencias largas y al retrato de la exuberante naturaleza incluyendo también escenas explícitas de partos reales volviendo a ser uno de los elementos característicos de la directora bordeando el sadismo pero, sobre todo, perturbando como así ocurre en la representación de un monstruo en descomposición. Todo en una sociedad marcada por el machismo y el conservadurismo que lleva a que tengan que ser determinadas mujeres las que, con sus actos, se rebelen frente a un sistema carcomido y que desprotege. "April", que cuenta con la producción de Luca Guadagnino, canaliza crueldad humana y activismo político a través de un simbolismo que denota opresión y miedo en un feroz, provocador e incómodo retrato que sabe remover y sorprender en un tiempo en el que ya todo parece inventado. Un combativo ejercicio de tensión que hace ganar peso a la realizadora y a la que lo más que se le puede reprochar es su excesiva tendencia a una alegoría que no aporta a una película ya de por sí potente sin necesidad de ese recurso.
Conviene saber: Premio especial del Jurado en el Festival de Venecia 2024 y vista en Toronto, Nueva York y San Sebastián.
La crítica le da un SEIS
