Históricos de cine: Ricardo I Corazón de León, el monarca de Robin Hood
Querido Teo:
Trovadores y juglares narraron sus hazañas y aventuras por toda Europa durante siglos. Fue el representante ideal del caballero andante, apuesto, noble y valiente. Un héroe romántico en tiempos sombríos que abanderó al Cristianismo en las Cruzadas. Un gran líder, guerrero y rey en una de las figuras más representativas del medievo. Hablamos de Ricardo I de Inglaterra, más conocido como “Corazón de León”. Ricardo, nació en Oxford en 1157, siendo el tercer hijo del Rey Enrique II y Leonor de Aquitania. Su madre lo trasladó a Francia a muy temprana edad, donde se crió y recibió una formación. Desde muy joven demostró dotes de mando, habilidades políticas y militares así como una fuerte y valerosa personalidad. A la edad de dieciséis años se reveló contra su padre, Enrique II, con el apoyo del monarca francés Felipe II. Tras un primer fracaso en Aquitania, en una segunda ocasión Ricardo derrotó y derrocó a su padre nombrándole sucesor. El 6 de Julio de 1189 tras la muerte de Enrique II en Chinon, Ricardo I es coronado rey de Inglaterra.
Sus primeras decisiones como rey generaron una enorme controversia. Tras su investidura contrajo matrimonio con Berenguela de Navarra lo que no eliminó los rumores de su posible homosexualidad. Su antisemitismo declarado, provocó una matanza de judíos en Londres que significó la huida de éstos. Todo ocurrió previo a su marcha a las Cruzadas, desestabilizando el país. Las luchas en la Tercera Cruzada Santa significaron toda su vida. Partió junto a Felipe II tras la toma de Jerusalén por Saladino, consiguiendo ampliar su dominio en el Mediterráneo. Aumentó sus riquezas que sirvieron para financiar las campañas bélicas que fueron su verdadera pasión. Durante las Cruzadas, cedió el poder de Inglaterra a otros, y logró grandes victorias en las batallas de Arsuf y Jaffa demostrando ser un gran estratega. Firmó la paz con Saladino en el tratado de Jaffa (1192) y a su vuelta de Tierra Santa, fue apresado cerca de Viena por Leopoldo V de Austria, con él que estaba enemistado por la muerte del hermano del monarca centroeuropeo.
En Inglaterra, mientras tanto, su hermano Juan aspiraba arrebatarle el trono con el apoyo de la Iglesia y el rey de Francia. A ninguno les interesaba la vuelta de Ricardo, y fue su madre Leonor, la que luchó lo indecible para que su hijo volviera a Inglaterra y al trono que le pertenece. El 4 de Febrero de 1194 Ricardo es liberado y coronado, de nuevo, rey en Winchester. A su vuelta, había sido despojado de todas sus tierras y riquezas, que fue recobrando paulatinamente en diversas campañas contra el rey francés Felipe II. El 6 de Abril de 1199, una flecha por accidente lo alcanzó en Chalus (Limousin, Francia), lo que le provocó unas heridas de las que no se recuperó, falleciendo en brazos de su madre.
Ricardo I, un hombre de una gran personalidad, cuya vida se forjó y formó en el fragor de la batalla (sólo pasó seis meses en tierras anglosajonas como rey). Se habla de un hombre de gran altura, rubio, bello, bravo e inteligente que amaba la aventura en unos tiempos de ambición, conveniencia, conspiración y traiciones. Una leyenda medieval de la que se hizo eco el mundo de la literatura y, cómo no, el cine. Siendo protagonista o secundario, Ricardo Corazón de León ha sido uno de los personajes cinematográficos por excelencia del séptimo arte.
Su filmografía ha ido unida en la gran mayoría de títulos a una leyenda contemporánea del monarca, Robin Hood. Las aventuras del proscrito de Locksley, ocurrieron durante las campañas militares de Ricardo I. Robin de Locksley estaba en contra de que Juan intentara usurpar el trono y era un fiel vasallo del rey. En todos los filmes sobre Robin Hood, Ricardo León era el fondo histórico y, en ocasiones, un protagonista secundario de la trama.
El primer Ricardo Corazón de León que se conoce en el mundo del celuloide fue Arthur Hollingsworth, en la primera pieza dedicada a “Robin Hood” (1912). Cortometraje anglo-estadounidense dirigido por Étienne Arnaud y Herbert Blaché. Treinta minutos que introducían por primera vez en el cine, tanto a Ricardo I como al ladrón de Sherwood. Un año más tarde, otro corto dirigido por Theodore Marston, “Robin Hood and Maid Marian” (1913). En él, Ricardo I sería interpretado por Walter Gibbs, en un pequeño papel. Sería en 1922 y 1923 cuando llegará la primera caracterización relevante del rey Ricardo. Fue a cargo de Wallace Beery, que interpretó de manera consecutiva al caballero andante por excelencia. Primero en el primer largometraje dedicado a Robin de Locksley, “Robin de los bosques” (1922). Dirigido por Allan Dwan, la cinta fue un gran éxito y una de las mejores adaptaciones del mito que puso en jaque a la nobleza de Nottingham. Un simpático film, interpretado por una de las estrellas del momento, Douglas Fairbanks. Beerie, repetiría papel, esta vez protagónico en “Ricardo Corazón de León (1923) dirigida por Chester Whitey y con un guión basado en la novela “El talismán” de Sir Walter Scott. El film narra las aventuras del rey en territorio musulmán, así como la relación con su esposa. Ricardo I es el absoluto protagonista, en este drama histórico dedicado íntegramente al caballero de Aquitania.
Cecil B. DeMille tras el éxito con "Cleopatra" (1934), continúa en el género histórico con “Las cruzadas” (1935). Espectacular film de aventuras que narra el matrimonio de conveniencia de Ricardo I así como su lucha con Saladino en la Tercera Cruzada. El monarca es interpretado por Henry Wilcoxon, en una adaptación libre del conflicto religioso sobre la toma de Jerusalén. Ricardo contrae matrimonio con Berengaria de Navarra, huyendo del compromiso con Alicia de Francia. El enlace le permitirá adquirir riquezas para seguir adelante con su cruzada en Tierra Santa. El principal añadido (y error) del guión basado en la novela de Harold Lamb, es el secuestro de Berengaria a cargo de Saladino. Pese a sus licencias e incongruencias históricas, “Las cruzadas” es uno de las obras de aventuras más importantes de los años treinta y del prestigioso director norteamericano. La filmografía sobre Ricardo Corazón de León, vuelve en 1938, de nuevo de la mano de Robin de Locksley. Probablemente, en la mejor cinta sobre ladrón de Sherwood, “Robin de los bosques” (1938). Interpretando el papel principal, el mejor Robin que haya existido: Errol Flynn. El filme cuenta como Robin Hood lucha contra Juan, hermano del rey Ricardo, al que intenta usurpar el trono de Inglaterra. Una película que envejece de manera notable, a pesar de sus más de setenta años desde el estreno. Hazañas, romance y humor para el lucimiento de Flynn, en su papel más recordado. El Ricardo de Inglaterra, tiene un breve papel, interpretado por Ian Hunter. Ganadora de tres Óscar, en uno de los hitos de aventuras de todos los tiempos.
Dos obras llegaron en 1952, con temática de aventura medieval pero muy diferente entre ellas. La primera, una cinta menor de Ken Annakin, "Los arqueros del rey" (1952). Creación que pasó inadvertida, en una anodina historia sobre el príncipe de los Bosques. En este film, Ricardo I, tiene una corta aparición con el rostro de Patrick Barr. La segunda, sin embargo, es otra de las grandes cintas de aventura de todos los tiempos, “Ivanhoe” (1952). Dirigida por Richard Thorpe, esta magnífica obra de aventuras, basada en la novela homónima de Sir Walter Scott, nos sitúa en el periodo de cautiverio de Ricardo en Austria. La negativa de Juan a pagar el rescate, contrasta con la lucha de un misterioso caballero, Ivanhoe, para que Ricardo vuelva a tierras anglosajonas. Espectacular versión, sobre las intrigas palaciegas de la época, protagonizado por unos excelentes Robert Taylor y Elizabeth Taylor. El rey Ricardo esta caracterizado por Norman Wooland, es una película clásica de la sobremesa española durante décadas, y que obtuvo tres nominaciones a los Óscar, entre ellos la de mejor película. Dos años más tarde, en 1954, otras dos producciones, ambas fallidas, llegaron de la mano en un género sobrecargado de películas de similar temática. “El talismán” (1954), adaptación libre de la novela de Walter Scott del mismo nombre, dirigida por David Butler y con un solvente reparto: Rex Harrison, Virginia Mayo, George Sanders (como Corazón de León) y Laurence Harvey. “El talismán” se sitúa en el frente abierto entre Saladino y Ricardo en la Tercera Cruzada. Cinta que fue un total fracaso tanto de público como de crítica. Al igual, que otra obra de menores pretensiones, “Los hombres del bosque de Sherwood” (1954). Producción británica, en la enésima adaptación sobre el mito de Robin Hood, dirigida por Val Guest, y que paso sin pena ni gloria por las carteleras británicas. El rey Ricardo tiene un breve papel, personalizado por Patrick Holt. El mundo musulmán también aporta su propia visión cinematográfica sobre las Cruzadas en “El Naser Salah el Dine” (1963). Película egipcia dirigida por Youssef Chahine, que se centra en el otro lado de la balanza, Saladino. El rey británico, está interpretado por un actor local, Hamdi Geiss. Un interesante punto de vista, en uno de los filmes más importantes de la historia de Egipto.
Previo a sus grandes hazañas, en su juventud en Aquitania (Francia) se centra uno de los mejores filmes de la filmografía de este personaje, “El león en invierno” (1968) dirigida por Anthony Harvey. Una etapa que no se había visto en la gran pantalla es la relación de Ricardo con su padre Enrique II y su madre Leonor de Aquitania. Es un drama histórico que narra la elección de la sucesión en el trono de Inglaterra. Para ello, Enrique II hará llamar a su esposa, en cautiverio en una torre y a sus tres hijos. Una excelente cinta independiente, protagonizada por unos soberbios Katharine Hepburn y Peter O’Toole. El recio y temperamental Ricardo, está caracterizado con solvencia por un joven Anthony Hopkins en uno de sus primeros papeles. Ganadora de tres Óscar, es una de las obras más importantes de finales de los sesenta.
Italia, no fue ajena a la historia de Robin Hood, y participó en su filmografía con una particular visión de las andanzas del noble proscrito en “El arquero de Sherwood” (1970). Dirigida por Giorgio Ferroni y protagonizada por el actor italiano del momento, Giuliano Gemma, “El arquero de Sherwood” es una simpática producción sin pretensiones que tuvo su destino en el mercado televisivo. El rey Ricardo, cómo no, tiene un pequeño papel interpretado por Lars Bloch. Un año más tarde, en 1971, nos llegó una intrascendente fábula sobre todo los mitos de Robin y Ricardo en “Up the charity belt”. Obra británica en clave de comedia, donde Ricardo I estaría caricaturizado por Frankie Howerd.
La animación de Disney ofrece, también la visión infantil de este mito de aventuras en “Robin Hood” (1973). Un largometraje que obtuvo un gran éxito de taquilla, y donde Peter Ustinov prestaba su voz al personaje de Ricardo Corazón de León. Animación a la vieja usanza dirigida por Wolfang Reitherman en un clásico de aventuras animadas de todos los tiempos. Junto a “Robin de los bosques” (1938) en 1975 Richard Lester nos deja la obra culmen sobre Robin de Locksley: “Robin y Marian”. Un retrato crepuscular sobre el mito, que se ganó el beneplácito de la crítica y el público con el paso del tiempo. Ambientada en la etapa donde el Rey Ricardo luchaba por recuperar sus pertenencias de vuelta de las cruzadas. El comienzo de la película nos describe el episodio de su muerte accidental. Un rey Ricardo, interpretado por uno de los grandes actores ingleses de todos los tiempos: Richard Harris. “Robin y Marian”, interpretados de manera brillante por Sean Connery y Audrey Hepburn, es un hermoso cuento, situado en los anales del séptimo arte.
En 1987, una modesta producción húngaro-americana dirigida por Franklin J. Schaffner, nos ofreció una visión fantástica sobre Ricardo I, en “Lionheart” (1987). Cinta de serie B, donde Corazón de León es interpretado por Neil Dickson, en un cuento de toques mágicos con el caballero negro como protagonista. En 1991 se estrenaron dos nuevas películas sobre Robin Hood, muy diferentes entre ellas. Una, mucho más modesta y fiel a la leyenda original, “Robin Hood: El magnífico” (1991) dirigida por John Irvin y cuyo guión se centraba en la enemistad de Robin con el Sheriff de Nottimghan, dejando al rey Ricardo fuera de la historia. Y otra, mucho más espectacular y pretenciosa, la popular “Robin Hood, el príncipe de los ladrones” (1991). Dirigida por Kevin Reynolds y protagonizada por el actor de moda Kevin Costner, es una muy liberada adaptación sobre el ladrón más famoso de todos los tiempos. Una aventura con añadidos de fantasía, que fue masacrada por la crítica y que, en cambio, triunfó entre los espectadores. Una Inglaterra en declive tras la marcha de su rey a las Cruzadas, de donde vuelve el hijo pródigo a Nottingham, Robin de Locksley. Ricardo Corazón de León, tiene una pequeña y final intervención con el rostro de Sean Connery, en un sorprendente cameo ya que el actor no aparecía en los títulos de crédito. Actores solventes (con un espectacular Morgan Freeman), y una gran banda sonora a cargo de Michael Kamen; “Robin Hood, el príncipe de los ladrones”, es una película que resiste el paso del tiempo, y que pese a sus incongruencias narrativas y cronológicas, se ha convertido en un clásico del cine de capa y espada.
El cine ruso, creo su versión de la historia de Ricardo I en “Ricardo Corazón de León” (1992). Producción épica sobre la vida del monarca británico dirigida por Yevgeni Gerasimov y protagonizada por Alexander Baluev. Al año siguiente, 1993, nos llegó una sátira sobre Robin Hood, dirigida por Mel Brooks, “Las locas aventuras de Robin Hood” (1993). Una comedia que vivió su éxito en el mundo televisivo donde se reservaría otro pequeño papel al Ricardo I en la piel de Patrick Stewark.
El mundo televisivo no fue ajeno al binomio Robin Hood-Ricardo Corazón de León. Numerosos seriales televisivos: “The adventures of Robin Hood” (1956-1958) con Ian Hunter interpretando al rey Ricardo; “Richard the lion heart” (1963) serie inglesa de treinta y nueve capítulos sobre la vida de Ricardo I, caracterizado por Dermot Walsh; la producción histórica “Doctor Who” emitió una serie de episodios sobre el monarca de Aquitania desde 1963 a 1965, personalizados por el actor Julian Glover; la serie de televisión de la BBC, “Robin Hood” (2007), emitida en España en La Sexta, contó con el personaje de Ricardo I en dos de sus episodios, interpretado por Steven Waddington.
Al igual que las series televisivas, se crearon incontables telefilmes: a destacar la producción dirigida por Andréi Konchalovski, “El león en invierno” (2003). Remake para la televisión del clásico de Anthony Harvey, interpretado por Patrick Stewark y Glenn Close cómo padres de Ricardo, que estaría personalizado por el actor Andrew Howard. Otros telefilmes con Ricardo I cómo fondo o protagonista fueron: “Ivanhoe”, varias versiones en 1958 (Bruce Seton como Ricardo); 1982 (Julian Glover); 1995 (Marek Vasut en Young Ivanhoe) y 1997 (Rory Edwards). “Robin Hood”: 1968 (el rey Ricardo interpretado por Douglas Fairbanks Jr en The Legend of Robin Hood); 1975 (Bernard Archard); 1984 (Robert Hardy y John Rhys-Davies); 1989 (Forbes Collins) y 2008 (Mike Pollick).
Volviendo a la gran pantalla, Ridley Scott es el último realizador que ha plasmado en celuloide a Ricardo Corazón de León. En 2005, presentó “El reino de los cielos”, una infravalorada epopeya sobre las cruzadas que fue un fracaso en todos los ámbitos. Scott nos sitúa en la lucha de Saladino por recuperar Jerusalén previo a lo que significó la Tercera Cruzada. Al final del metraje aparece el Rey Ricardo I (interpretado por Ian Glenn) buscando al protagonista Balian de Ibelin (Orlando Bloom) que marcará el comienzo de una nueva campaña en Tierra Santa. Scott presentó dos años más tarde, su montaje del director, en una cinta más completa y que mereció mejor trato por parte de la crítica. Una visión épica y contemporánea de Las Cruzadas que continúa en el siguiente filme del realizador británico. Scott vuelve a la épica este mayo de 2010 estrenando una nueva versión de "Robin Hood". Ricardo Corazón de León (Danny Huston) vuelve de Las Cruzadas, y a su lado un valeroso guerrero, Robin Longstride. Una nueva visión sobre el ladrón del bosque de Sherwood, muy alejada de la leyenda habitual. Un filme de grandes expectativas y donde Scott espera resarcirse de su fracaso anterior en el género épico.
Ricardo Corazón de León, un personaje histórico unido cinematográficamente a una leyenda, Robin Hood. Una rica filmografía, que quizás mereciera un mayor protagonismo para el aventurero monarca de Aquitania. Un caballero andante que volverá a cabalgar, con toda seguridad, en la gran pantalla.
“No hay hombres perfectos, sólo intenciones perfectas”.
Azeem El Grande (Morgan Freeman) en "Robin Hood, el príncipe de los ladrones"
"En un mundo donde los carpinteros resucitan, todo es posible".
Leonor de Aquitania (Katherine Hepburn) en "El león en invierno"
Emilio Martín Luna
Guau! Qué fantástico repaso, ahora toca sacar tiempo para bucear en todos estos títulos.