Espresso: Serenidad y una leyenda

- "Serenity"
es la apuesta de ciencia ficción para este otoño. Se basa en la continuación de una serie usamericana llamada "Firefly". No tuvo un gran éxito de cara al gran público y no superó los catorce episodios de emisión debido a su alto coste y porque la audiencia no fue benévola con el producto.
En la historia se cuentan las misiones del capitán Malcom Reynolds y su tripulación. Serenity es el nombre de la nave espacial que les sirve para desplazarse. La función de esta tripulación consiste sobre todo en transportar a personas y mercancías, pero en uno de esos viajes portan a dos extraños sujetos que resultaran ser unos fugitivos pertenecientes a la Alianza intergaláctica.
La trama es creación de Joss Whedon creador de series de éxito como "Buffy cazavampiros" y ganador de un Óscar por su trabajo en "Toy story".
A pesar del desastre de la serie en su exhibición, lo que si logró fue un buen puñado de fans que se hacen llamar "browncoats". Ellos defienden la calidad de la serie alegando que es una interesante mezcla entre ciencia ficción espacial y western, que posee unos buenos personajes y guiones ágiles y entretenidos. Por ello, se muestran expectantes ante la llegada al cine de su serie de cabecera deseando el éxito de la misma.
La película se estrena mañana en los USA y el próximo 21 de octubre en nuestro país, así que de momento quédate con su trailer

- Uno de esos proyectos cuyo único destino es viajar de cajón en cajón ha errado su ruta para situarse por fin en la mesa de algún productor. Se trata del bestseller "I am legend", obra de Robert Matheson que se adentra en el desencadenamiento de una guerra biológica que convierte en mutantes a los habitantes de los Ángeles. En esta situación sólo un científico puede ser el héroe que frene la amenaza.
Francis Lawrence, director de "Constantine", se encargará de llevar el ansiado proyecto a buen puerto bajo la producción de Warner. Éste ha sido considerado un proyecto maldito de la década de los 90 porque ya pasó por las manos de Ridley Scott y Michael Bay, aunque ha sido ahora tras el empujón de su anterior película cuando Matheson se ha llevado el gato al agua comenzando a rodar a principios de 2006.