La Música Clásica De Nuestro Tiempo: "El poder del perro" // Jonny Greenwood

Lo que estáis escuchando es Prelude, tema de Jonny Greenwood para la banda sonora de "El poder del perro". Ya hablamos de Greenwood en relación con "Spencer", incluso adelantamos algo de la nueva película de Jane Campion, pero no ha sido hasta que se ha estrenado la película en Netflix, y por ende la música en plataformas, que después de escucharla varias veces he pensado que era lo apropiado traerla a la sección, ya que creo que resulta una composición mucho más compleja y estimulante de lo que puede parecer en una primera escucha, como creo que la película gana más allá del primer visionado, gracias a su complejidad y detallismo llevados al extremo.

A pesar que dirigió algunos capítulos de la miniserie "Top of the take", "El poder del perro" es el retorno a la dirección de Jane Campion 12 años después de su último largometraje, "Bright star", drama romántico protagonizado por Abbie Cornish y Ben Whishaw. La directora neozelandesa vuelve por la puerta grande después de ganar el León de Plata en Venecia y siendo ahora mismo la favorita al Oscar a la mejor dirección con una película que, a pesar que causó opiniones mixtas en el festival italiano, ha gustado mucho al público incluso convirtiéndose en la película más vista de Netflix en su semana de estreno.

Para poner la guinda al pastel, la música compuesta por Greenwood se está convirtiendo en la competidora real de Hans Zimmer en los Oscar, y hoy la analizaremos en profundidad.

La música guía de manera áspera una sensación de suspense y unos estados de ánimo de los personajes que continuamente reprimen sus emociones, convirtiendo, como bien identifica a Greenwood, la atmósfera como elemento central de su música.

Realizada con un conjunto de piano, cuerdas, vientos y metales en su mayoría, la banda sonora por momentos es grandiosa pero de una forma melancólica, como atormentada, todo desde una perspectiva bella, elegante a la vez que inquietante.

Greenwood y Campion hablaban sobre la música prácticamente a diario; Greenwood comenta en una entrevista que le enviaba imágenes de sets de baterías de los años 20, pero enfatizando siempre que se encontraban en un western moderno. De hecho cuenta que cuando componía parte de la banda sonora, no podían usar orquestas debido a la COVID-19, así que gran parte tuvo que "falsearlo" con su propio cello. Greenwood también relata que él tiene una pianola y que, al igual que con el cello, tuvo que usarla él mismo, y que Campion recibió horas y horas de samples y demos del compositor.

También cuenta que empezó a componer antes de empezar el rodaje, y que incluso en éste escuchaban algunas de las piezas del cello que Greenwood componía y que, según él, puede que transmitir ese ambiente con su música influyera algunas de las escenas que se rodaron. Aunque también es cierto que él mismo dice que de lo que más orgulloso se siente es de haber sido el que tuvo la idea de usar la Marcha Radetzky en ESA escena de la película.

El piano, de hecho, simboliza el personaje de Rose Gordon, interpretado por una espectacular Kirsten Dunst, haciéndose eco de su torpeza social y de lo que termina siendo símbolo de su desestabilidad mental, que termina sonando por momentos "inhumano", en palabras del propio Greenwood.

Siguiendo con los instrumentos que son clave en la película, pasamos por la trompa, que representa el estado mental de Peter Gordon al inicio del film, interpretado por un sorprendente Kodi Smit-McPhee. A Peter le arrollan la extensidad de las montañas y el desierto, siendo un paisaje extraño pero sobre todo imponente, haciéndole sentir fuera de lugar. Greenwood quería evitar el tropo de las cuerdas arrolladoras para acompañar paisajes arrolladores. De hecho, él mismo confiesa que se inspiró en escenas de "Star Trek" de los años 60, donde en su memoria tenían mucho sonido de metal atonal, así que contrató a un par de músicos de trompa y escribió algunos duetos para ellos, duetos sin muchos vibratos y que suenan como ecos de una masculinidad reprimida, que cuanto más fuerte suenan, más abiertos y enfadados se vuelven.

Otro de los instrumentos clave es el banjo, que se utiliza de forma diegética, es decir, que convive con los personajes en el plano y en escena y no se trata de la que estamos habituados a escuchar en las películas (esto se llama extradiegética), ya que el personaje de Phil, interpretado por un arrollador Benedict Cumberbatch, lo toca constantemente en el film. Aun así Greenwood decidió no incluirlo en ninguna de las piezas de la banda sonora. Esta decisión vino a que en la propia película el banjo tiene entidad propia, y tanto él como Campion decidieron que abstenerse de su uso en la música intensificaría cada aparición de éste, declarándolo como un instrumento que podía llegar a sonar oscuro y siniestro.

Legamos al cello, el instrumento principal de la banda sonora de "El poder del perro", donde Greenwood lo toca como si fuese un banjo, con la misma técnica de "fingerpicking", o también llamado "fingerstyle", que es una técnica de tocar la guitarra desarrollada por músicos de blues y folk en Estados Unidos en la década de los 20. Crean realmente una estela de sonido ensordecedora, de alguna forma alienante, que rodea el aspecto masculino de los personajes que la directora neozelandesa intenta desintoxicar. Podríamos decir de hecho que el cello es el instrumento que simboliza a Phil y Peter y, por ende, el eje de la película.

De todas formas, a pesar de este análisis de instrumentos y personajes, el mismo Greenwood resalta que él nunca plantea sus composiciones a partir de ello, si no que escribe situaciones que van acorde al tono, look visual o colores de la película.

El álbum se compone de 16 temas breves pero rotundos, que establecen a Greenwood como un artista superlativo que lo mismo te abre un Coachella que colabora con compositores de música clásica, síntesis que sirve para ejemplificar perfectamente lo que el compositor británico representa. Un Greenwood que ahora es el compositor de moda en Hollywood, y del que escucharemos hoy el tema 25 years. El álbum está lleno de temas espectaculares e inolvidables y de los que algunos hemos podido escuchar aquí hoy, pero no me he podido resistir a elegir como colofón final ese tema principal que se te mete entre los huesos y no te suelta.

Recordaros que ya está disponible en todas las plataformas la banda sonora original compuesta por Jonny Greenwood para la película "El poder del perro".

Hasta la próxima banda sonora.

Iker González Urresti