Si ya nos turbó en "Atracción fatal", Adrian Lyne fue algo menos inquietante pero igual de erótico en "Infiel", película que en definitiva contaba un triángulo amoroso a raíz de un encuentro callejero entre una mujer que parece tener la vida perfecta y un bohemio encantador pero enigmático. En esta película, Adrian Lyne sigue jugando con el sexo y la obsesión como elemento destructivo de un matrimonio como ya lo contara en la mencionada "Atracción fatal" y en "Una proposición indecente".
El encuentro entre Connie y su futuro amante, que se dedica a la compraventa de libros y que presenta un acento francés que actúa como el detonante que influye en el impulso de la mujer, para iniciar una serie de encuentros sexuales sin mucha más explicación que el desarrollo de los instintos más básicos y primarios. Cómo una mujer que no es infeliz en su matrimonio, que lo tiene todo, encuentra un aliciente a una vida demasiado planificada con la aparición de este "encantador de serpientes". Y es que Diane Lane (nominada al Oscar por su trabajo) lograba que, en ningún momento, el espectador sea capaz de reprochar su actitud. Cómo con la inocencia y la confusión del nuevo sentimiento se ve involucrada, casi sin haberlo previsto, en un thriller erótico que ya no es capaz de parar. Precisamente ese es el género en el que encuadra Lyne esta película que debe mucho a "La mujer infiel" de Claude Chabrol: "Fue una de mis películas favoritas, una especie de obra de Hitchcock en la que un marido se da cuenta poco a poco de que su mujer está teniendo una relación amorosa. Siempre me ha encantado y la tomé como referencia para esta película, eso sí, muy libremente".
Sobre todo en su primera mitad donde el film es más erótico y menos thriller, que es en lo que deriva después cuando entra en juego el marido despechado, la cinta es un continuo retrato de juegos y tocamientos eróticos entre la sexy cuarentona que es Lane y el atractivo francés que es Olivier Martinez. Una pareja de alto voltaje pero que teniendo en cuenta quien era el tercero en discordia perdía gas, porque… ¿acaso alguien se cree que una mujer puede ser infiel a Richard Gere?. Sólo nos explicamos que así fuera por el poco favorecedor tinte que lucía en esta película para disimular sus canas…
"Esta es la historia de un barco. Un barco que arrastró la marea hasta la orilla y que cambió muchas vidas. Como la de una mujer llamada Janet y de Samuel..." a lo que el estupendo narrador que nos va guiando por la serie añade otros cuatro personajes dignos de estar en algún elenco de los cerebros de los Coen o de Tarantino: el capo de una banda llamado "El Sastre", su principal ejecutor enamorado de la cerámica, un policía tontorrón y su madre, que hace un pan de plátano excelente. ¿Violencia? Coen y Tarantino, no debo deciros más, salvo que la gente de efectos especiales ha tenido mucho trabajo y los actores se lo han pasado muy bien.
Otro año más de música, otro año más de bandas sonoras, y otro año más en el que juntaré en la sección de manera totalmente subjetiva las 10 (mas 2 extras) composiciones que más me han gustado en el 2023. Todo hay que decirlo, siempre me arrepiento un poco de dejar de lado las bandas sonoras de las series, que siempre están al mismo o a mejor nivel que el de las películas, por lo que este año las incluiré con todo el mérito del mundo. Pero antes de pasar a la lista, recordar que estos fueron los tops de 2010, 2011, 2012, 2013, 2014, 2015, 2016, 2017, 2018, 2019, 2020, 2021 y 2022.
* La figura de Paul Auster no ha sido ajena al cine y con su muerte a los 77 años deja un vacío importante siendo uno de los grandes escritores de Estados Unidos de las últimas décadas. En su haber títulos como “La invención de la soledad” (1982), “La trilogía de Nueva York” (1985-1986), “El país de las últimas cosas” (1987), “Leviatán” (1992), “Tombuctú” (1999), “El libro de las ilusiones” (2002), “La noche del oráculo” (2003), “Brooklyn follies” (2005), “Viajes por el scriptorium” (2006), “Un hombre en la oscuridad” (2008) o “Sunset Park” (2010). Un escritor amante de las libertades y defensor de los derechos civiles que se mostró tajante con políticas absolutistas de países como China o Turquía en contra de la libertad de expresión (a los que se negó a visitar) y que encabezó marchas contra Donald Trump.
Niccolò Ammaniti es uno de los autores italianos más apreciados en el extranjero. Sus libros se han traducido a más de cuarenta idiomas pero también es conocido en el cine italiano e internacional por sus guiones, sus obras llevadas al cine e incluso por haber participado como actor. No se prodiga demasiado y por tanto recibe mucha atención cuando lo hace. Ganador del premio literario más importante de Italia hace años, ahora entra en un terreno muy actual: el debilitamiento de las democracias por el desgaste del oleaje mediático politizado. Lo hace a través de una mujer, la esposa del primer ministro de Italia.