"Hablar"
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El argumento: Compuesta por un total de 20 historias que giran en torno a la palabra y a la comunicación, y que se entrecruzan a lo largo de un recorrido de 400 metros: desde la madrileña plaza de Lavapiés hasta la Sala Mirador. Hablar es un viaje entre el teatro y el cine, rodada en un plano único y en continuidad de 80 minutos y medio kilómetro de recorrido, en el popular barrio de Lavapiés de Madrid. Los personajes hablan, discuten, ríen, lloran, amenazan, susurran, gritan, roban, se citan, se enfadan, se abrazan... y proponen al espectador una reflexión sobre el inmenso poder de la palabra.
Conviene ver: "Hablar" es una cinta coral combativa sobre el valor de la palabra y con un marcado carácter social ahondando en la crisis de nuestro país y en las desigualdades propias de un país marcado por la crisis y por las decisiones políticas del gobierno. Una película rodada en un único plano de 80 minutos ambientado en Lavapiés en la que al final el experimento queda por encima del maniqueo mensaje. Arriesgada e inspirada por momentos es un homenaje a la profesión de actor, al artista como propagador de la injusticia y conciencia de la sociedad de un país, y a la cultura en sentido amplio como deja constancia ese segmento final con Petra Martínez y Juan Margallo. Al final el que hayan sido los actores los que hayan creado a sus personajes desde la escritura, y con la consabida improvisación, provoca una obligada irregularidad que en algunos casos llega al punto de clase amateur. Los personajes van saliendo y entrando con naturalidad en una atmósfera apagada, caótica, desarraigada y en el que los problemas de nuestro tiempo, económicos y de comunicación, van fluyendo de manera orgánica. Entre los momentos fuertes los protagonizados por Juan Diego Botto, Miguel Ángel Muñoz o Estafanía de los Santos y entre los peores los de Marta Etura o María Botto.
Conviene saber: Nueva colaboración entre Joaquín Oristrell y la maestra de actores Cristina Rota tras “Sin vergüenza” (2001) y “Los abajos firmantes” (2003) volviendo a darse la mano de manera metacinematográfica la realidad y la ficción de una profesión junto al toque de compromiso y denuncia.
La crítica le da un CINCO
