Las cinco secuencias de... Bill Nighy

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Querido primo Teo: 

Bill Nighy se ha convertido en uno de los intérpretes británicos más apreciados de este siglo XXI gracias a una presencia arrolladora. Es el cruce perfecto entre un lord inglés y una estrella del punk, nos cuadraría perfectamente que de día fuera speaker del parlamento británico y de noche quemara cualquier antro de la escena londinense. Es capaz de elevar de estatus a cualquier proyecto, incluso de aquel que podría ser carne de la serie Z. Este actor curtido en los escenarios londinenses y en la televisión, alcanzó la fama cuando ya había superado los 50 años gracias a Billy Mack, el rockero de vuelta de todo de “Love actually”, pero le ha faltado ese gran papel con el que le lluevan los reconocimientos en la profesión.

Todo hasta la llegada del solitario funcionario en el tramo final de la vida de “Living” de Oliver Hermanus donde se enfrentaba al desafío de estar a la altura del clásico “Vivir” de Akira Kurosawa e, indudablemente, ese reto se ha superado con creces con la nominación al Oscar. Es un buen momento para repasar los mayores hitos en la carrera de este intérprete británico de 73 años.

"Love actually" (2003)

Bill Nighy ya tenía una más que dilatada, prestigiosa y premiada carrera en el teatro, la radio y la televisión, e incluso había alcanzado cierta notoriedad en los Estados Unidos con la comedia rockera “Siempre locos” (1998) cuando trascendió a la cultura popular gracias a “Love actually” (2003) de Richard Curtis. Una comedia romántica coral y en torno a la Navidad que fue un soplo de aire fresco a inicios del siglo XXI, en un momento en el que el mundo necesitaba aferrarse a algo esperanzador tras los atentados del 11-S y las guerras de Afganistán e Irak.

Nighy era la pimienta entre aquellas historias de amores equivocados, perdidos y encontrados al meterse en la piel de un rockero viverrentas que trata de recuperar el éxito de antaño y que es capaz de regalar momentos antológicos. Billy Mack hizo que la industria se fijara en el enorme potencial cinematográfico que tenía Bill Nighy, que ya era el villano de la vampírica “Underworld” (2003), y fue premiado por la Asociación de Críticos de Los Ángeles (LAFCA). Se llevó el Bafta al mejor actor de reparto y probablemente se quedó a muy poco de la nominación al Oscar. 

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"La chica del café" (2005) 

Dos viejos colaboradores con Nighy como son el guionista Richard Curtis y el director David Yates concibieron para el actor “La chica del café” (2005), un telefilm producido por la BBC y la HBO que narra la historia de amor entre un funcionario, con muy mala suerte en sus relaciones personales, y una mujer más joven a quien conoce en un café. “La chica del café” gozó de mucha aceptación cuando se estrenó y le proporcionó a Nighy una candidatura al Globo de Oro mientras que su compañera de reparto Kelly Macdonald se alzó con el Emmy.

“La chica del café” es una comedia romántica que se centra en personajes solitarios, de hecho la inspiración de Bill Nighy fue el trabajo de Adam Sandler en “Embriagado de amor” (2002) de Paul Thomas Anderson, y puede recordar demasiado a “Lost in translation” (2003) de Sofia Coppola, pero a pesar de cierto idealismo se hace cercana. 

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"Piratas del Caribe: En el fin del mundo" (2007) 

Junto a Billy Mack el personaje más popular de la carrera de Bill Nighy ha sido Davy Jones y eso que la cara del actor británico apenas se ve en la exitosa serie cinematográfica de “Piratas del Caribe”. Davy Jones toma el nombre del legendario pirata del cofre Davy Jones, un eufemismo de las profundidades del océano. Es un temido pirata, capitán del Holandés Errante, una criatura que sufre una maldición que le hace tener el aspecto de un calamar, además de acercarse a tierra firme una única vez por década, y que se recorre los mares tomando como prisioneros a los supervivientes de los barcos que va hundiendo dándoles la opción de morir o formar parte de su tripulación. 

Interpretar a un personaje tan supeditado a la tecnología como es Davy Jones fue un reto para Nighy que tenía que transmitir todo su talento para darle hondura, y gracias a su trabajo consiguió convertirle en uno de los personajes más amados de “Piratas del Caribe”. 

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"Una cuestión de tiempo" (2013) 

Richard Curtis volvió a dirigir a Bill Nighy en “Una cuestión de tiempo” (2013), una comedia romántica en la que los hombres de una familia tienen la facultad de viajar en el tiempo para enmendar sus errores. El gran hallazgo de esta película, protagonizada por Domhnall Gleeson y Rachel McAdams, es que comienza siendo la historia de un joven que aprovecha su don para hacer siempre lo correcto y así conseguir a la mujer de sus sueños y que termina siendo una reflexión sobre la aceptación de la vida tal y como es, al igual una preciosa historia sobre la relación de un hijo con su padre mayor y enfermo.

Todo ello fue lo que le hizo conquistar el Premio del Público en el Festival de San Sebastián en 2013 y trascender en el género de las comedias deudoras del clásico de Harold Ramis “Atrapado en el tiempo” (1993). Bill Nighy, como el padre que transmite su poder al mismo tiempo que sufre sus consecuencias, está perfecto en un papel hecho a su medida pero lamentablemente apenas tuvo su calado en la carrera de premios.

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"La librería" (2017)

Bill Nighy como todo buen actor británico fue reclutado por la saga Harry Potter pero como última escena destacamos su vinculación a la española “La librería” (2017) de Isabel Coixet que fue un gran éxito entre el público femenino y adulto, ese que llena las salas que están alejadas de los blockbusters. “La librería”, basada en la novela de Penelope Fitzgerald, nos presenta a una joven viuda que en un pueblo inglés de finales de la década de los 50 decide abrir la primera librería de la zona contando con la oposición local.

Nighy encarna al único apoyo que encuentra la librera interpretada por Emily Mortimer, un viudo ermitaño y lector empedernido que ve su apuesta como una manera de desafiar al puritanismo del lugar. Isabel Coixet se convirtió con “La librería” en la gran vencedora de los premios Goya del 2018 en donde Bill Nighy aspiró al galardón al mejor actor de reparto. 

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Mary Carmen Rodríguez 

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