Conexión Oscar 2018: Las 30 películas que inician la carrera

Querido Teo:

Todavía con el recuerdo fresco de esa noche que nunca olvidaremos con el tan comentado sobre que privó de la gloria (tras ya haberla tocado) a “La la land”, comienza una nueva temporada de premios que, a priori, se antoja tan igualada como desconcertante ya que todavía (aunque sea pronto) no hay un título que a estas alturas pueda considerarse favorito a nada. Es posible que sea una carrera en el que las películas compitan como un pelotón ciclista (muy parejas) y que sólo marquen distancias, como casi siempre, a partir de la última curva (lo que viene a ser en lenguaje Oscar el tema de los Gremios). Podría ser una carrera de transición (tras la muy intensa y generacional del pasado año en el que la Academia expío ciertas culpas tradicionalmente lanzadas por sus detractores) aunque confiemos que terminen emergiendo títulos para el recuerdo en una edición que se celebrará el próximo 4 de Marzo y que es bien probable que vuelva a arrojar una ganadora con pocos Oscar (tendencia habitual de la Academia en la última década y que ni siquiera el año pasado viró) en una gala en la que repetirá Jimmy Kimmel (tras salir airoso del episodio protagonizado por Warren Beatty y Faye Dunaway) y que estrenará presidente (John Bailey) en una edición con cifra redonda (la 90ª) que debería tirar de nostalgia y de esos montajes de vídeo de la Historia de los Oscar que elevan el espíritu contribuyendo a que sigamos enamorados de todo este salseo en clave dorada.

1º “Los archivos del Pentágono” (Steven Spielberg)

El subgénero periodístico ha tenido poco predicamento en los Oscar (con honrosas excepciones en la década de los 70 que fue la época de esplendor de estas películas) pero, finalmente, y sorprendiendo a más de uno, “Spotlight” pudo imponerse en la carrera de 2016 con una película sobria sobre una investigación llevada a cabo por los periodistas de The Boston Globe que terminaría reportándoles el Pulitzer por destapar una trama de casos de pederastia dentro del seno de la Iglesia Católica. En esta ocasión, Steven Spielberg, Tom Hanks y Meryl Streep se han sumado a la que pretende ser la película de periodismo definitiva para una generación de espectadores.

La película nos contará la historia de cómo el periódico The Washington Post publicó varios papeles del Pentágono y cómo su editor y el autor del artículo consiguieron desafiar al Gobierno de USA y mantener su derecho de libertad de prensa. Sin duda, es una historia necesaria en estos tiempos oscuros que vive Estados Unidos, que pasado por el prisma íntegro y honesto de Spielberg, y con Hanks y Streep a la cabeza, puede dar lugar a una película muy interesante. Hanks y Streep dan vida, respectivamente, a los periodistas Ben Bradlee y Kay Graham que revelaron los documentos sobre la implicación de Estados Unidos en Vietnam entre los años 1945 y 1967 y como eso acabó empañando las administraciones de Lyndon B. Johnson y Richard Nixon provocando un gran escándalo después de que estos documentos secretos clasificados en 47 volúmenes fueran obtenidos por el analista militar Daniel Ellsberg. Es verdad que apostar por Spielberg es demasiado obvio (como en los años en que lo hicimos inicialmente por “Caballo de batalla” y “El puente de los espías” en los que terminó sin posibilidades) pero en algún momento debería llegar la segunda película ganadora del Oscar (sólo ganó el máximo premio “La lista de Schindler” en 1994) para uno de los genios indiscutibles del entretenimiento en la últimas cuatro décadas.

2º “Dunkerque” (Christopher Nolan)

Ha sido el acontecimiento del verano y la posibilidad de que Christopher Nolan por fin pueda alcanzar (al menos) su primera nominación al Oscar como mejor director y quién sabe también si su primera estatuilla. “Dunkerque” es el definitivo puñetazo en la mesa de Christopher Nolan en el panorama cinematográfico actual con el que propone una experiencia tan realista e inmersiva como angustiosa y épica desde la emoción más intensa sumergiéndonos en las playas de Dunkerque en la operación de rescate que pudo salvar a más de 300.000 personas de una muerte segura tras el acorralamiento por parte de las tropas nazis de un gran número de soldados británicos y franceses, a pesar de contar con muy pocos medios para ello, ante las diezmadas fuerzas militares y con la ayuda de barcos civiles a cargo de marineros tan aficionados como implicados en la causa. Nolan nos lleva por un film plástico y sensorial en el que lo que importa es el concepto de lo que se cuenta, más que los personajes cuyo desarrollo está sobre todo para añadir algunas dosis de emoción humana a la historia ya que ni siquiera precisa de mostrar a un solo nazi para acrecentar la tensión o fomentar la dualidad entre buenos y malos. No es una historia sobre personajes en concreto, con la clásica estructura de inicio, nudo y desenlace, sino sobre la fuerza humana y cooperadora que posibilitó que el empeño y determinación de una serie de hombres, los tan cinematográficos héroes anónimos, contribuyeran cada uno desde su perspectiva y posición a salvar a todos estos soldados fomentando la heroicidad y el compañerismo dejados a su merced por los gobiernos de turno que envían a sus jóvenes a una muerte segura.

Nolan entra en las páginas de oro del cine bélico y, sobre todo, demuestra su brillantez en todos los aspectos cinematográficos siendo una experiencia con imágenes que se te quedan en la retina; ambiciosa, sensorial y, sorprendentemente, emocionalmente épica por toda la verdad y oficio que rezuma en una experiencia apabullante y absorbente que nos lleva directamente a las playas que dan título a la película y que demostraron que la fe y el espíritu colectivo lleva al hombre a una victoria con la que Nolan sigue acrecentando su leyenda y que, con esta cinta, debería de una vez quitarse todo los prejuicios y tópicos que sus detractores canalizan en su figura. Ahora sólo falta ver si la Academia se rinde ante él (su dominio técnico puede convertirla con claridad en la películas más nominada este año) ya que, independientemente de que “Dunkerque” se alzara o no con el premio a la mejor película, la labor de Nolan es incontestable y bien sería coherente un premio para él como realizador teniendo en cuenta como en los últimos años se han disociado con habitualidad los premios de película y dirección.

3º “Una vida a lo grande” (Alexander Payne)

“Una vida a lo grande” encierra una curiosa premisa con la que Alexander Payne aspira a su cuarta nominación consecutiva tanto en película como en dirección tras “Entre copas”, “Los descendientes” y “Nebraska”, ganando por las dos primeras el Oscar al mejor guión adaptado. Aun así, le falta la película de referencia en una filmografía de buenos títulos a redescubrir pero que todavía no le ha permitido saltar la valla hacia el conocimiento del público mayoritario, no teniendo que confundir notoriedad en este tipo de espectadores con tener que renunciar a su estilo.

La historia es una sátira de ciencia ficción en la que un hombre ve como todos sus problemas se resolverían si tuviera la capacidad de disminuir su tamaño, pudiendo vivir en ciudades pequeñas que no necesitan tantas dosis de los recursos naturales que pueblan el planeta. Matt Damon y Kristen Wigg protagonizan una historia que podría volver a demostrar que Payne tiene tomada la medida al gusto de la crítica de cine general y también de los académicos pudiendo volver a repetir en sus apartados habituales de película, dirección y guión (coescrito con Jim Taylor). Venecia y Toronto nos dilucidarán si la película puede ser candidata a todo o se queda como ilustre nominada.

4º “The Florida project” (Sean Baker)

Casi como si fuera una precuela de “American honey”, la cinta de Andrea Arnold que puso en el foco en la desesperanza de una generación fruto del derrumbe del sueño americano, Sean Baker nos lleva a esa USA de apartamentos residenciales comunitarios, piscinas, caravanas y perritos calientes en un verano de camaradería y juegos entre tres niños de orígenes diferentes que coinciden en sus vacaciones. “The Florida project” es todo un canto a la frescura y a las experiencias de una infancia gracias a tres niños (especialmente una Brooklynn Prince que desarma) que contribuyen a que sea una película muy orgánica y naturista en la que te crees todo lo que ocurre divirtiéndote con las situaciones y travesuras de estos niños sobre los que trasluce el problema de la inmigración, la precariedad económica, el desarraigo familiar y un futuro incierto bajo la atenta mirada de un Willem Dafoe que es el responsable de ese recinto. A pesar de que le sobran unos 15 o 20 minutos, siendo reiterativa en alguna situación, el visionado es refrescante y garantiza tanto el entretenimiento por la inconsciencia de unos personajes nacidos para ser supervivientes en un entorno hostil, en el que sólo la picaresca les salvará, y la reflexión de una realidad no desconocida pero si oculta en las cloacas del “american dream” y más en una USA despersonalizada y esperpéntica en la era Trump.

Con una buena campaña por parte de su distribuidora A24 Films, nominada al Oscar por “La habitación” y ganadora del premio por “Moonlight”, la cinta tiene a su favor el boca-oreja que puede generar (fue la revelación de Cannes a pesar de verse en la sección de la Quincena de Realizadores en la que los focos no están tan presentes) y el poder cubrir el nicho de película “indie” que va creciendo en la carrera como fue el caso tanto de las cintas mencionadas como de “Bestias del sur salvaje”, compitiendo su protagonista con el desparpajo que en aquella demostraba Quvenzhané Wallis.

5º “El instante más oscuro” (Joe Wright)

Joe Wright es uno de esos nombres que pretende volver a la buena senda tras tocar fondo con “Pan: Viaje a Nunca Jamás”. Y es que el director de “Orgullo y prejuicio”, “Expiación” y “Anna Karenina” no ha terminado de confirmar lo que prometía en esas películas y ahora presenta una carrera en la que salirse del cine de época no le ha podido sentar peor con una filmografía errática y con poco lucimiento hacia el Oscar. Eso puede cambiar con el clásico biopic rodado con el empaque british habitual y que se adentra en la figura de Winston Churchill para lucimiento de Gary Oldman a la caza de su primer Oscar.

Bajo el manto de Working Title y con guión de Anthony McCarten (nominado al Oscar por “La teoría del todo”), Joe Wright se embarca en “El instante más oscuro”, un proyecto sobre Winston Churchill y su oposición frente a la amenaza nazi durante la Segunda Guerra Mundial enarbolando como líder la resistencia del pueblo británico haciendo caso omiso a las peticiones del ejército de Hitler como dominador mundial. Veremos si la película está a la misma altura que el “tour de force” que garantiza Oldman que sólo puede sufrir que tengamos un Churchill tan reciente y tan formidable como el de John Lithgow para “The crown”. Todo sin olvidar que recientemente también ha sido interpretado por actores de la talla de Brendan Gleeson, Timothy Spall o Brian Cox.

6º “La última bandera” (Richard Linklater)

No ganó el Oscar pero con “Boyhood” Richard Linklater ofreció la experiencia de la temporada contando la vida a lo largo de 12 años de un chico en su paso de la niñez a la adolescencia; de la dependencia de unos padres desestructurados y un mundo que se abre a su paso a la necesidad de autonomía y de aprender la claves para manejar el timón de una vida por vivir. Con “La última bandera” el director abre este año el Festival de Nueva York sustentado en un trío protagonista formado por Steve Carell, Bryan Cranston y Laurence Fishburne en la que puede ser la película más convencional, pero también más lacrimógena, del realizador de la trilogía de “Antes del amanecer”.

La película es una especie de remake de “El último deber”, aunque en realidad se basa en la continuación del libro en el que se inspiraba ésta y que fue escrito por Darryl Ponicsan. Estos actores recogen el testigo de los personajes interpretados por Jack Nicholson, Randy Quaid y Otis Young. La historia se centrará en este trío de marines, ya retirados, que piden ayuda a antiguos compañeros para recuperar el cuerpo del hijo de uno de ellos, caído en Irak. Produce Amazon Studios y el guión, como es habitual, corre a cargo del propio Linklater.

7º “Call me by your name” (Luca Guadagnino)

“Call me by your name” dará que hablar y para algunos puede ser a nivel de estilo, temática y sensibilidad la “Carol” de este año, narrando un amor que tendrá que superar todas las convenciones y prejuicios sociales y ambientado en una localidad al norte de Italia en el verano de 1983 donde se conocen durante sus vacaciones un adolescente de 17 años (Timothée Chalamet) y un joven estudiante de 24 años (Armie Hammer) invitado por los padres del primero a la residencia familiar de verano situada en la Riviera. Una historia iniciática sobre el primer amor y el despertar a la vida que se vende como una cinta que se mueve entre la sensibilidad y la vulnerabilidad de una relación incipiente y relevadora en el que la conexión entre ambos y el conocerse a ellos mismos es lo que importa.

El guión corre a cargo del propio Guadagnino junto al veterano James Ivory (que por fin podría ganar el Oscar a sus casi 90 años) y Walter Fasano adaptando la novela de André Aciman. La cinta lleva haciendo ruido desde el Festival de Sundance y parece que será la confirmación del director de “Melissa P.” (2005), “Yo soy el amor” (2009) y “Cegados por el sol” (2015). Sólo queda ver si la Academia la acoge con pasión o la termina viendo como una apuesta estilística de autor a la que dejar de lado.

8º “Blade Runner 2049” (Denis Villeneuve)

La “Blade Runner” original optó a 2 Oscar en 1983 (dirección artística y efectos visuales) pero la leyenda a su alrededor la ha convertido en un clásico universal, temático y estético que está por encima de todo premio. La empresa del canadiense Denis Villeneuve no es nada fácil pero, tras ver su filmografía y conseguir su primera nominación al Oscar como mejor director gracias a “La llegada”, la historia de replicantes y unicornios parece en las mejores manos posibles una vez que Ridley Scott ha pasado el testigo. Ahora bien, ¿superará la Academia sus recelos con el cine de ciencia ficción y estará dispuesta a premiarla más allá de nominaciones técnicas?

“Blade Runner 2049” nos contará la historia de un nuevo Blade Runner de la ciudad de Los Ángeles llamado K, interpretado por Ryan Gosling, que descubrirá un secreto que podría poner en caos a toda la sociedad. Su descubrimiento le llevará a una búsqueda desesperada por encontrar a Rick Deckard, desaparecido treinta años atrás, lo que podría suponer otra despedida de Harrison Ford a uno de sus icónicos personajes. Ojo a la oportunidad de que por fin, y gracias a esta película, el director de fotografía Roger Deakins se haga con el Oscar tras 13 intentos.

9º “La reina Victoria y Abdul” (Stephen Frears)

Con “Su majestad Mrs. Brown”, Judi Dench se quedó a las puertas del Oscar interpretando a una huraña reina Victoria recluida tras la muerte de su marido, momento en el que uno de sus fieles sirvientes intenta devolverle las ganas de vivir. Ganó el Globo de Oro y el Bafta y era sólo el principio de su buena relación con la Academia saldada con 7 nominaciones ganando la estatuilla por sus ocho minutos en “Shakespeare enamorado” dando vida a otra monarca, la reina Isabel I.

Ahora vuelve a dar a la reina en “La reina Victoria y Abdul”, adaptación del libro de Sharani Basu con guión de Lee Hall (“Billy Elliot”) y dirección de Stephen Frears (“Philomena”) en su tercer trabajo con la actriz. Abdul Karim fue un siervo de origen islámico que pasó a ser uno de los hombres de confianza de la reina en sus últimos años, a pesar de que ello era mirado con recelo por los miembros de la casa real. Focus y BBC Films producen y parece bastante obvio que estaremos ante uno de esos “crowd pleaser” históricos tan convencionales como efectivos y emotivos. ¿No es demasiado tentador darle su segundo Oscar a Judi Dench y cerrar el círculo con el personaje con el que comenzó su edad de oro en el cine tras triunfar en el teatro y la televisión británica?

10º “Madre!” (Darren Aronofsky)

Al igual que directores contemporáneos como David Fincher o Christopher Nolan, Darren Aronofsky es uno de esos artistas que garantizan que la gente vaya al cine sólo por su nombre. Con “Noé” pinchó en hueso pero ahora el director se adentra en el sexy thriller y en la tortuosidad pasional y psicológica en una cinta que claramente sigue la esencia de “Cisne negro” por la que consiguió 5 nominaciones al Oscar, incluyendo película y director.

“Madre!” va sobre una pareja, formada por un poeta en crisis y su joven esposa, que ven cambiar su vida cuando un extraño y su mujer aparecen de la nada; recobrando él la inspiración pero también iniciándose un infierno para ella. Jóhann Jóhannsson se encarga de la banda sonora y Matthew Libatique de la fotografía en la que puede ser una morbosa y estimulante experiencia que puede también darle muchas alegrías en la carrera a Jennifer Lawrence (le vendrá bien salirse del yugo de David O. Russell) y para Michelle Pfeiffer en un comeback que le podría reportar su cuarta nominación al Oscar 25 años después de la conseguida por “Por encima de todo”.

11º “La guerra de las corrientes” (Alfonso Gómez-Rejón)

The Weinstein Company presenta una de sus pocas bazas este año (junto a “Wind river” de Taylor Sheridan) en una cinta en la que veremos el talento y rivalidad de dos genios como Thomas Edison (Benedict Cumberbatch) y George Westinghouse (Michael Shannon) con el fin de crear una red eléctrica eficiente y rentable. Edison defendió el empleo de una corriente continua para la distribución de energía eléctrica sobre una corriente alterna, que fue apoyada por Westinghouse Electric y una multitud de empresas europeas.

Habrá que ver como de fuerte está Weinstein en la campaña pero, si juega bien sus cartas, podríamos estar ante un nuevo “The imitation game” contando con dos actores respetados por la crítica y el público como son Benedict Cumberbatch y Michael Shannon, que va rozando la posibilidad de alzarse más pronto que tarde con una estatuilla como actor de reparto tras sus nominaciones por "Revolutionary Road" y "Animales nocturnos". Veremos también como se desenvuelve con esta propuesta academicista el director de “Yo, él y Raquel”.

12º “El hilo invisible” (Paul Thomas Anderson)

Por no saber no se conoce ni el título de la nueva colaboración entre Paul Thomas Anderson y Daniel Day-Lewis, ya habiendo declarado éste último que se retira tras este trabajo lo que puede dar más morbo a la hora de poder premiarle aunque no es la primera vez que el irlandés realiza uno de esos anuncios de folclórica flamenca. La película en cuestión sería una cinta de época, ambientada en el mundo de la moda en los años 50 y supondría la primera película de Day-Lewis tras “Lincoln”, que lo convirtió en el único actor ganador de 3 Oscar en la categoría principal y, por ende, en una leyenda viva del cine.

Paul Thomas Anderson sigue manteniendo una relación esquiva con la Academia que le ha nominado cuatro veces como guionista (“Boogie nights”, “Magnolia”, “Pozos de ambición” y “Puro vicio”) pero que sólo le ha destacado en película y director por la cinta petrolífera que le dio su segundo Oscar a Day-Lewis. ¿Cambiará su suerte o estaremos ante un título que de la expectación pasará al ostracismo?

13º “Mudbound” (Dee Rees)

Tras un año en el que la raza negra quedó reivindicada con la presencia de “Moonlight”, “Fences”, “Figuras ocultas” y “Loving”, y tras el fiasco de “El nacimiento de una nación”, llega rezagada otra película que se adentra en esa realidad histórica y que viene con un feedback positivo desde su proyección en el Festival de Sundance.

Dos hombres regresan de la Segunda Guerra Mundial a una pequeña población rural en Mississippi. Allí tendrán que adaptarse a su nueva vida tras la guerra y al racismo imperante en la región. Una película sobre el universal espíritu de sacrificio y sobre la América dividida con la que parece que se hablará mucho de la directora Dee Rees, que se revela en su segundo trabajo adaptando la novela de Hillary Jordan y que viene avalada por Netflix que intentará dar el salto a los Oscar en esta época de expansión y de notoriedad de la plataforma.

14º “Suburbicon” (George Clooney)

Si George Clooney vuelve a la dirección, y lo hace adoptando el estilo del humor negro de los Coen, la película ya garantiza todo el interés con un proyecto cuyo germen se encuentra en los hermanos (que la escriben y que pensaron en dirigirla en su día aunque tanto Clooney como su socio Grant Heslov han participado en la reescritura) y que trata sobre un matrimonio de un barrio residencial de Pennsylvania en 1959 que acaba inmerso en una espiral de crímenes tras una metida de pata de ambos, al sufrir un ataque en su propia casa, y la aparición de un tercer personaje.

Parece que podríamos estar ante una digna heredera de “Sangre fácil” y “Fargo” (el trailer recuerda mucho a ambas) en esta cinta para la que Clooney no se ha reservado ningún papel y que cuenta con Matt Damon, Julianne Moore, Oscar Isaac y Josh Brolin. Con Clooney parece que no hay medias tintas y es capaz de lo mejor (“Buenas noches y buena suerte”, “Los idus de Marzo”) y lo peor (“Ella es el partido”, “Monuments men”) así que habrá que ver en qué lado de la red cae la pelota.

15º “Wonder wheel” (Woody Allen)

Se antoja complicado que una película de Woody Allen que se estrene en Diciembre, y que sea elegida como cinta de clausura en el Festival de Nueva York, vaya a ser una de las hijas menos agradecidas de su filmografía. No sólo está ese hecho sino también en que Woody rueda por primera vez con Kate Winslet a la que puede haber brindado uno de sus inolvidables personajes femeninos.

De “Wonder wheel” sólo se sabe por el momento que se ambienta en el Nueva York de finales de la década de los 50 del siglo pasado, en un entorno de amores, infidelidades y gangsters por lo que el enredo y la nostalgia marca de la casa está garantizada. Para la actriz británica podría ser su octava nominación al Oscar y para Woody Allen su 17ª nominación como guionista.

16º “Wonderstruck” (Todd Haynes)

“Wonderstruck” de Todd Haynes era uno de los platos fuertes del pasado Festival de Cannes y no estuvo a la altura de las expectativas siendo una de las cintas que más sensación de decepción generó. Esperamos que gane en segundos visionados como fue el caso de “Carol”, una joya de culto moderna que se presentó en el mismo certamen dos años atrás. La cinta supone la adaptación del cuento infantil “Wonderstruck” de Brian Selznick, del que ya se llevó al cine “La invención del Hugo” y que cuenta con la producción de Amazon.

Nos encontramos ante dos historias con cincuenta años de diferencia sobre dos niños en un cuento en el que ambos intentan encontrar su hueco en el mundo. Por un lado Ben, que acaba de perder a su madre en un accidente de tráfico y que quiere viajar a Nueva York para buscar a un padre desconocido. Por otro lado Rose, una niña sorda que cuenta toda la historia a través de imágenes fascinada por una actriz de Broadway, terminando confluyendo las dos tramas en una fusión provocadora de emoción a través del texto y la imagen. El oligofrénico Oakes Fegley y la rota y melancólica mirada de Millicent Simmonds protagonizan los dos segmentos que son todo un culto a la ciudad de Nueva York (entre la nostalgia de la década de los 20 y los vistosos 70) secundados por Julianne Moore y Michelle Williams y destacando la música de Carter Burwell (con David Bowie muy presente en la banda sonora) y la fotografía de Edward Lachman. Si con “Carol” no tuvo fortuna no parece que vaya a cambiar la suerte con una película tan artísticamente melancólica como fallida en su arco emocional.

17º “Detroit” (Kathryn Bigelow)

La única directora ganadora del Oscar, y una realizadora que en vez de sangre tiene metralla en sus venas, vuelve a la carrera con una cinta que ya se ha estrenado en USA y que ha estado presente en muchos medios estas semanas; no sólo porque el resto de contendientes no han asomado todavía sino por cumplirse la efemérides de los hechos que cuenta. Una vez más, Bigelow tira de nervio y ritmo para ser la conciencia de la Historia reciente de Usamérica en lo que se refiere a guerras y disturbios.

La cinta se adentra en las revueltas raciales que tuvieron lugar en Detroit durante cinco días del verano de 1967 entre la policía y la población negra que se saldaron con 43 muertos y más de 2.000 heridos. Bigelow ha vuelto a contar con Mark Boal en el guión pero la críticas mixtas y el haberse estrenado demasiado pronto provocan que posiblemente sea olvidada dentro de unos meses aunque seguramente Megan Ellison con su Annapurna Pictures peleará por tenerla en la conversación hasta el final.

18º “La batalla de los sexos” (Jonathan Dayton y Valerie Faris)

Los directores de “Pequeña Miss Sunshine” vuelven a la carrera con una película que juega con la curiosa premisa real en la que se basa y en el carisma de dos actores como Emma Stone (en la cresta de la ola) y del camaleónico Steve Carell que, además de participar en la película de Linklater en un rol más dramático, aquí juega a ser uno de esos robaescenas que se hacen con la película aunque en esta cinta tenística sea el coprotagonista.

La película es una comedia deportiva y reivindicativa que adapta la historia real del partido de tenis en el que se enfrentaron la jugadora número 1 en 1973, Billie Jean King, y el ex campeón Bobby Riggs. Un hecho que sirvió para que se avivara el debate sobre el distinto rasero con el que se valora a las mujeres y a los hombres en terrenos como el deportivo aunque, bien es verdad, que eso es análogo al día a día de nuestra sociedad y también a la brecha salarial de los actores de Hollywood.

19º “La forma del agua” (Guillermo del Toro)

Guillermo del Toro sigue con un enorme predicamento en el panorama actual a pesar de que muchos de los proyectos que se le asocian terminan en agua de borrajas y, sobre todo, termina centrándose en el apadrinamiento de proyectos y nuevos directores desde la producción. En lo que llevamos de década sólo ha estrenado como director “Pacific Rim” en 2013 y “La cumbre escarlata” en 2015 pero ahora se sienta de nuevo en la silla de realizador con “La forma del agua”, una especie de “La joven del agua” en versión romántica y sensorial.

La cinta nos lleva a 1963, en plena Guerra Fría, para contar la historia de una mujer muda que empieza a trabajar como conserje en un laboratorio en el que se alberga a un gigantesco anfibio, una extraña figura que hará nacer sentimientos en la protagonista saliendo ella así de una vida monótona e intrascendente. Una premisa fantástica y sentimental que habrá que ver si sale de sus cánones habituales y es aupada por los festivales de otoño y los círculos de críticos sobre todo si, como parece, Sally Hawkins vuelve a ofrecer una de esas interpretaciones que te dejan atrapado.

20º “Las estrellas de cine no mueren en Liverpool” (Paul McGuigan)

¿Será esta la película por la que Annette Bening se alce con el Oscar? Ingredientes hay para ello si tenemos en cuenta que interpretará a la actriz Gloria Grahame en una etapa de declive y decadencia en su vida artística y personal pero que se vio avivada por el romance que mantuvo con el joven Peter Turner. Sería su quinta nominación, y al igual que en el caso de Julianne Moore que también vio cómo su película era promocionada por Sony Pictures Classics cuando la compró en el Festival de Toronto, no necesitará que sea su mejor interpretación para ganar el Oscar sino que sea la adecuada en el momento justo , como bien podría ser este año.

Gloria Grahame fue uno de los rostros más populares de los años 40 y 50, participando en títulos tan emblemáticos como “El mayor espectáculo del mundo” y “Oklahoma!”. Ganó el Oscar a la mejor actriz de reparto por “Cautivos del mal”, aunque uno de sus personajes más recordados será el de Violet en “¡Qué bello es vivir!”. Con una vida personal truculenta y marchitándose su estrellato poco a poco; se casó con Nicholas Ray, del que acabaría divorciándose de él y casándose con su hijastro. El guión de “Las estrellas de cine no mueren en Liverpool” corre a cargo de Matt Greenhalgh y está basado en el libro que escribió el propio Peter Turner, interpretado aquí por Jamie Bell, en 1987.

21º “Molly´s game” (Aaron Sorkin)

Aaron Sorkin y Jessica Chastain no están en el mejor momento de sus carreras. Sorkin se quedó fuera de los Oscar por su valorado guión para “Steve Jobs”, mientras que Chastain ha ido encadenando títulos algo intrascendentes como “El caso Sloane” y “La casa de la esperanza”, cintas que ni ella ha podido salvar de cierta decepción. Ahora se unen en "Molly´s game", la que va a ser la primera película como director del oscarizado guionista de “La red social” de la que, al menos en su avance, ya garantiza diálogos disparados al ritmo de metralleta y una intensidad de gran nivel.

La cinta adapta las memorias de Molly Bloom, una esquiadora y estudiante que, tras no poder acceder a los Juegos Olímpicos, cambio de rumbo y (tras un periodo trabajando de camarera) se puso a organizar eventos de póker con los que se hizo millonaria con sólo 26 años pasando por ellos medio Hollywood (entre ellos Tobey Maguire, Leonardo DiCaprio o Ben Affleck) y siendo una figura muy conocida en el mundillo; una irrupción muy fulgurante hasta que el FBI se puso a seguirle la pista y la mafia a acosarla quedando su destino en manos de su abogado. Jessica Chastain, en un personaje que tambaleó los cimientos del Hollywood ludópata, podría conseguir su tercera nominación al Oscar tras quedarse fuera por películas como las ya mencionadas de este año o “El año más violento”.

22º “El gran showman" (Michael Gracey)

Hugh Jackman lleva tiempo intentando sacar adelante el proyecto del musical sobre P.T. Barnum, empresario del circo que se popularizó con sus espectáculos ambulantes de animales y acróbatas. Fox orquesta un proyecto que cuenta con Michael Gracey como director, Michael Arndt, Jenny Bicks y Bill Condon como guionistas, Seamus McGarvey como director de fotografía y Justin Paul y Benj Pasek creando las canciones tras triunfar tanto con “La la land” como con el musical “Querido Evan Hansen”.

Barnum creó su imperio ya pasados los 60 años tras una trayectoria como empresario y político. Poco más se sabe de un proyecto que adapta el musical estrenado en Broadway en 1980 y al año siguiente en Londres contando con la música de Cy Coleman, letra de Michael Stewart y libreto de Mark Bramble ahora presentando a un oficinista que, tras perder su trabajo, encontraba la senda profesional y vocacional para su vida. Hugh Jackman asume un papel que, aunque en cine puede quedar como demasiado lineal y poco dado al reto interpretativo, fue con el que ganaron Jim Dale el Tony y Michael Crawford el Laurence Olivier Award.

23º “Una razón para vivir” (Andy Serkis)

Andrew Garfield prosigue con buen tino su carrera tras optar por primera vez al Oscar con “Hasta el último hombre” y rodar con Scorsese la trascendental “Silencio”. Ahora se adentra en uno de esos dramas de superación personal dirigido por Andy Serkis (siendo la ópera prima del actor conocido por dar vida a Gollum o King Kong) en el que da vida a un joven aventurero que quedará paralizado por la polio, circunstancia que no le impedirá seguir con su espíritu de viajar por el mundo junto a su mujer (Claire Foy) y seguir viviendo experiencias contagiando optimismo a todos los que aparecen a su paso.

Una de esas películas que seguro que será acusada de lacrimógena y sensiblera pero que en los 90 hubiera dado una nominación casi automática a Garfield. Veremos si este año vuelve a hacerse hueco. El guión corre a cargo de William Nicholson (“Tierras de penumbra”, “Gladiator”) y la cinta inaugurará el Festival de Londres en 2017 siendo allí su premiere europea.

24º “Stronger” (David Gordon Green)

Jake Gyllenhaal y Tatiana Maslany son los protagonistas de “Stronger”, la película que cuenta la tragedia de los atentados de la maratón de Boston sucedidos el 15 de Abril de 2013 y que está dirigida por David Gordon Green.

La cinta se basa en las experiencias de Jeff Bauman, superviviente del atentado que perdió las dos piernas cuando detonaron las bombas al encontrarse en la línea de meta para apoyar a su novia, que corría la maratón que dejó 5 muertos y casi 300 heridos. Ya en el trailer vemos que los dos actores son carne de nominación o, por lo menos, para estar presente en la conversación siempre que la película logre sostener toda la carga emocional de la historia ya que lo peor que le puede pasar es que sea tildada de telefilmera lo que sería un lastre para las opciones de un Gyllenhaal que sigue en su expediente con la solitaria nominación de “Brokeback Mountain”.

25º “La seducción” (Sofia Coppola)

“La seducción” se ha confirmado como el remake, más que nueva versión, de la cinta que dirigió en 1971 Don Siegel con Clint Eastwood y Geraldine Page en los principales papeles. Sofia Coppola logra impregnar de brumosa vistosidad la historia de un desertor herido de la Guerra de Secesión que acaba alojado en una casa de señoritas sureñas gobernadas con la exigencia y los códigos morales de una especie de abeja reina. Ya desde la primera escena de la película, con esa niña tarareando por el bosque, ya percibimos que vamos a encontrarnos con algo atrayente en el que Coppola, casi por primera vez, se libera de acartonamientos artificiosos y pretenciosos y se deja llevar por la historia, salpicando unos agradecidos toques de humor negro, y un reparto de actrices comandado por Nicole Kidman, Kirsten Dunst y Elle Fanning como un grupo de mujeres que se mueven entre la unión entre ellas y la competitividad pasional cuando aparece un lobo con cresta de gallo con el cuerpo malherido de Colin Farrell.

Una cinta entretenida y que juega con esta estética entre sombras iluminada por las velas con la que se acerca a su propio universo (“Las vírgenes suicidas”) pero llevándolo a un alto nivel tanto estético como digerible para todos los públicos. Coppola ganó el premio a la mejor dirección en el Festival de Cannes pero queda mucho camino para pensar que en los Oscar puede repetir candidatura.

26º “Logan” (James Mangold)

“Logan” es la despedida en forma de western crepuscular del personaje de Lobezno encarnado por Hugh Jackman en nueve películas desde la primera vez en “X-Men” en el año 2000. Comparada en calidad, pretensiones y estética con “Mad Mad: Furia en la carretera”, cintas como ésta demuestran la buena salud del cine comercial como espectáculo si se aborda con inteligencia y no como una propuesta casi robótica en su ejecución sino con la épica necesaria para mantener el interés, el drama de personajes y la emoción basada en la nostalgia en las múltiples referencias que rememoran toda la evolución de unos personajes a los que conocimos en sus momentos de gloria pero que ahora, conscientes de que su tiempo ha pasado, viven como proscritos tendentes a la extinción y también con el remordimiento provocado por un hecho que provocó la desaparición mutante.

Una película que es emocionante y entretenida y que , aunque no esté rodada así, encajaría mucho con ese montaje que parece que nos llegará de la misma en blanco y negro y que tiene entre sus principales aciertos (además del tono y sus personajes) el que sugiera más que muestre (se optó por eliminar del montaje el llamado incidente de Westchester que atormenta a los protagonistas) lo que añade esa tristeza, resta la espectacularidad más palomitera y hace grande a una película que funciona por sí misma. El mundo mutante se merece este año dar el salto a mayores categorías que las puramente técnicas pero ya sabemos que, salvo excepciones como en el caso de la película de George Miller, la Academia no suele estar muy por la labor de albergar a estas cintas.

27º “Star Wars: Los últimos jedi” (Rian Johnson)

Segunda entrega de la nueva trilogía que llega marcada por la desaparición de Carrie Fisher (que aún tendrá una importante presencia en esta cinta) y que continuará con el discurrir de Rey y su encuentro con el maestro Luke Skywalker que nos sorprendió con su aparición final en “El despertar de la fuerza” cinta que, aunque no llegó a estar entre las nominadas a mejor película, sí que consiguió 5 nominaciones entre ellas una meritoria candidatura al mejor montaje. Rian Johnson ha cogido el testigo de J.J. Abrams en la dirección, mientras que Abrams ejercerá labores de producción ejecutiva.

28º “Tres anuncios en las afueras” (Martin McDonagh)

Martin McDonagh dirige este drama con tintes de comedia negra sobre una madre que ha perdido toda esperanza de saber quién ha asesinado a su hijo después de que la investigación policial no encuentre pruebas concluyentes y comienza una cruzada con tres pancartas para avergonzar al inepto sheriff, interpretado por Woody Harrelson.

Una madre coraje que supone todo un lucimiento para Frances McDormand, ganadora del Oscar por “Fargo”, y que encuentra petróleo en el mordaz e ingenioso guión de McDonagh (ya nominado por “Escondidos en Brujas”) y que podría repetir candidatura en ese apartado.

29º “Coco” (Lee Unkrich y Adrian Molina)

No parece que vaya a ser un año deslumbraste en el campo de la animación (que siempre suele mirar entre sus nominadas hacia otras apuestas artesanales e internacionales saliendo de las tradicionales fronteras de Hollywood) pero hay que fijarse en la apuesta de Pixar para este año que no es otra que "Coco".

Se agradece que Pixar frene un poco el ritmo de secuelas y presente un proyecto original que se adentra en las raíces de la tradición mexicana siendo un canto a la vida y a la música. La historia se centra en Miguel, un chico que quiere seguir los pasos de su ídolo musical Ernesto de la Cruz para lo que contará con el apoyo de su bisabuela a pesar de que la tradición musical ha sido vetada por su familia durante muchos años debido a que se le echa la culpa a este arte de que su tatarabuelo abandonara a su familia para dedicarse a la música. Junto a un esqueleto intentará demostrar su talento terminando en la llamada Tierra de los Muertos, recibir la aprobación de su familia y volver al mundo de los vivos.

30º “15:17 Tren a París” (Clint Eastwood)

Se rumorea que lo nuevo de Clint Eastwood, todavía sin fecha de estreno, podría llegar sobre la bocina a esta carrera con un estreno limitado a finales de año. De momento cierra nuestra lista (por si acaso) con serias posibilidades de subir mucho más arriba en el caso de que se confirme su estreno. Clint Eastwood sigue su romance artístico y taquillero con Warner para las que ha rodado las exitosas “El francotirador” y “Sully” continuando con su nueva cinta su galería de héroes anónimos (y también víctimas) de la sociedad reciente marcada por el miedo, la alienación y la doble moral.

“15:17 Tren a París” es la adaptación del libro de Anthony Sadler, Alek Skarlatos y Spencer Stone sobre el intento frustrado por parte del terrorista del ISIS Ayoub El Khazzani de asesinar a más de 500 personas en un tren que recorría el servicio entre Amsterdam y París el 21 de Agosto de 2015. El terrorista, actualmente en prisión, fue neutralizado por los propios pasajeros entre los que se encontraban dos militares retirados coautores del libro de cuya adaptación se encargará Dorothy Blyskal, colaboradora de Eastwood en su anterior cinta.

Nacho Gonzalo